INTRODUCCIÓN
Con la aparición de la COVID-19 a finales del año 2019 en la ciudad china de Wuhan, y tras su rápida propagación por el mundo hasta ser declarada como pandemia el 11 de marzo de 2020,(1) las ciencias geográficas encontraron, en la causa de aportar soluciones desde su potencial y versatilidad, la posibilidad de demostrar una vez más el valor que para la ciencia y la humanidad tiene el vínculo geografía-salud.
De este modo, a través de la Geografía Médica, cuyo objetivo fundamental es el análisis de las variaciones de la salud humana, complejos patógenos, o enfermedades endémicas y las condiciones ambientales como sus posibles causas,(2) se han mostrado las características de la distribución de la pandemia en el mundo y aportado un gran número de investigaciones en apoyo a la toma de decisiones por las autoridades gubernamentales y de salud. En muchos casos, los resultados han estado apoyados en la implementación de las herramientas de análisis espacial y estadístico, y las representaciones cartográficas en los sistemas de información geográfica (SIG).
Estas técnicas y herramientas aplicadas desde la ciencia han formado parte, con un papel protagónico además, del modelo de vigilancia epidemiológica adoptado en Cuba, país que ha logrado importantes resultados en el control de la pandemia, luego de que se notificara el 11 de marzo del 2020 los tres primeros casos de pacientes importados, procedentes de Italia, con la enfermedad.(3)
La evolución de la pandemia en Cuba ha transitado por diferentes etapas de severidad, y existen territorios con mayores complicaciones que otros, atendiendo a sus situaciones geográficas, importancia económica y características socio-demográficas fundamentalmente. Cienfuegos, es una de las provincias cubanas que menores afectaciones ha sufrido por la COVID-19, debido a su relativo aislamiento del eje central de país, el cual se caracteriza por un mayor flujo interprovincial de personas; y también, por la destacada labor de sus organismos de salud y gobierno y la disciplina de su población. Sin embargo, como todo territorio, presenta grupos de población con comorbilidades ante un proceso infeccioso como el causado por el virus SARS-CoV-2, por lo que la identificación de estos espacios geográficos socialmente vulnerables permite encaminar acciones que eviten la propagación del virus en pacientes que puedan desarrollar formas graves de la enfermedad, e incluso llegar a la muerte, además de poder planificar de manera más certera recursos hospitalarios, farmacéuticos y el proceso de vacunación, para así continuar con los resultados satisfactorios en la provincia.
Entiéndase entonces población vulnerable como un segmento de la población o grupos poblacionales, que tienen probabilidades de ser afectados por eventos nocivos como consecuencia de tener atributos comunes relacionados con factores socioeconómicos, ambientales, sanitarios, entre otros.(4)
El objetivo de la investigación es analizar la distribución de la población vulnerable a la COVID-19 según la prevalencia de enfermedades no transmisibles en la provincia de Cienfuegos.
MÉTODOS
Se realizó un estudio descriptivo, de corte transversal, con carácter geográfico-epidemiológico, en la provincia de Cienfuegos, con datos procesados correspondientes al año 2020, los cuales fueron suministrados por la Dirección de Registros Médicos y Estadísticas del Ministerio de Salud Pública.
Se analizó la vulnerabilidad poblacional según prevalencia de enfermedades no transmisibles (hipertensión arterial, diabetes mellitus, cardiopatía isquémica, cáncer, asma bronquial y enfermedad pulmonar obstructiva crónica) en relación con grupos etarios (25-59 años, 60 años y más) y área de salud.
Fueron digitalizadas mediante el empleo de los SIG, un total de 20 áreas de salud a partir de los límites establecidos por los organismos de salud pública locales, como unidades territoriales asumidas para desarrollar los análisis. Se elaboraron mapas temáticos a través de herramientas de análisis espacial y estadístico en los SIG del total de pacientes con prevalencia de las enfermedades mencionadas por área de salud según grupo de edades correspondiente.
El universo de población estudiada fue de 172 682 personas; de ellas, 80 032 (46,35 %) en el grupo de edades de 25-59 años, y 92 650 (53,65 %) en el de 60 años y más.
Posteriormente, estos mapas temáticos fueron integrados mediante una suma lineal ponderada utilizando las herramientas de evaluación multicriterio en los SIG. Se le asignó un valor según el peso en el pronóstico no deseado, para casos ya diagnosticados con la enfermedad COVID-19, según el orden de enfermedades anteriormente expuesto. De este modo, se obtuvieron dos mapas de vulnerabilidad poblacional a la COVID-19, los que concluyeron con la estratificación de las áreas de salud en cincos grados de vulnerabilidad poblacional: muy alto, alto, medio, bajo y muy bajo; como una expresión cualitativa (ordinal) para diferenciar el comportamiento entre las unidades territoriales asumidas en el estudio.
La investigación fue aprobada por el Consejo Científico de la Facultad de Geografía de la Universidad de La Habana.
RESULTADOS
En el grupo de edades de 25-59 años, las áreas de salud de la provincia de Cienfuegos que presentaron altos grados de vulnerabilidad poblacional a la COVID-19 fueron: Miguel Alipio de León, municipio de Aguada de Pasajeros; Raúl Suárez Martínez, de Rodas; las dos áreas de salud homónimas, Manuel Piti Fajardo, de los municipios de Palmira y Cruces; Aracelio Rodríguez Iglesias, de Cumanayagua; y Manuel Piti Fajardo y Octavio de la Concepción del municipio Cienfuegos. El área de salud con muy alto grado de vulnerabilidad resultó ser Cecilio Ruiz de Zárate, perteneciente al propio municipio cabecera. Las áreas identificadas con muy baja vulnerabilidad fueron: Francisco del Sol, de Palmira; San Blas, de Cumanayagua; Antonio Sánchez, de Aguada de Pasajeros; y Tomás Romay, del municipio de Abreus. (Fig. 1).
En el grupo de edades de 60 años y más, las áreas de salud que presentaron altos grados de vulnerabilidad fueron: Miguel Alipio, de Aguada de Pasajeros; Manuel Piti Fajardo, Ernesto Guevara, Octavio de la Concepción y Jose Luis Chaviano, todas ellas del municipio cabecera; Manuel Piti Fajardo, de Palmira; y el área de salud de Cruces. Los grados de vulnerabilidad muy altos se identificaron en las áreas Aracelio Rodríguez Iglesias, de Cumanayagua; y Cecilio Ruiz de Zárate, del municipio de Cienfuegos. De manera general, este último resultó el más afectado. Las áreas de salud menos vulnerables fueron: Francisco del Sol, de Palmira; San Blas, de Cumanayagua; CEN, de Cienfuegos; Antonio Sánchez, de Aguada de Pasajeros; y Tomás Romay, del municipio de Abreus. (Fig. 2).
DISCUSIÓN
A nivel mundial, importantes resultados se han alcanzado desde los campos del saber de la Geografía Médica en el enfrentamiento a la COVID-19, mediante el empleo de las herramientas cartográficas y los análisis espaciales y estadísticos. Esto ha permitido un acceso constante a la información por los organismos de Salud, entidades gubernamentales y la población de manera general.
Desde los propios inicios de la pandemia, mapas en línea han mostrado al mundo en diferentes escalas de detalle la incidencia de la enfermedad en los territorios; otros han permitido relacionar los datos de la COVID-19 con información sociodemográfica, y servido como herramientas de análisis espacio-temporal de la evolución de la enfermedad, la distribución de las defunciones, focos de contagio, zonas recuperadas o con prioridad de intervención sanitaria.(5) Entre los más difundidos se encuentra el mapa del Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que representa la distribución espacial, intensidad y evolución de la enfermedad en los afectados por el virus.(6)
A nivel nacional, el mapa como síntesis del estudio y procesamiento de diversas variables ha sido utilizado de manera constante como fuente de información a la población, y su elaboración, analogía, abstracción y silogismo generalizador ha permitido a investigadores de diferentes ramas, lograr estudios decisivos en el control de la pandemia. Entre ellos desatacan los análisis realizados para la identificación de espacios socialmente vulnerables y factores que favorecen la transmisión del virus SARS-CoV-2 en provincias cubanas por parte de profesores y estudiantes de la Facultad de Geografía de la Universidad de La Habana, especialistas del Instituto de Higiene, Epidemiología y Microbiología y el Instituto de Medicina Tropical “Pedro Kouri”.(7,8)
La presente investigación constituye un instrumento valioso para la toma de decisiones en espacios socialmente vulnerables a la COVID-19 en la provincia de Cienfuegos.
La base cartográfica elaborada de las áreas de salud tiene un valor añadido por la posibilidad de su utilización en el trabajo administrativo de las instituciones de salud y en futuras investigaciones.(8) La metodología trazada es fácilmente extrapolable a otras provincias y territorios del país, por lo que sirve de base para hacer extensivos estos estudios de gran importancia y actualidad.
El trabajo con dos grupos de edades diferentes, permite asociarlos a factores de riesgo a que están expuestos por separado, lo que ayuda a la gestión y planificación en los diferentes territorios en la atención dispensarizada de pacientes vulnerables o enfermos de COVID-19.
Una de las principales fortalezas, por la posibilidad de lograr una mayor interpretación espacial del tema abordado y una toma de decisiones más organizada y certera por parte de las autoridades competentes, es la representación espacial de los resultados obtenidos mediante la integración de los factores considerados, a través de mapas elaborados en los SIG.
Las áreas de salud más vulnerables fueron identificadas en los municipios de mayor importancia económica, y por ende, de un alto número de habitantes; sobre todo, en la ciudad de Cienfuegos, en la parte más antigua, más densamente poblada y de mayor número de servicios, todo ello supone un riesgo extra, ya que en los espacios que con más facilidad se propaga el virus SARS-CoV-2, reside un mayor número de personas vulnerables a la COVID-19.
Conflicto de intereses:
No existen conflictos de intereses.
Contribución de autores:
Conceptualización: Alder Luis León Brito
Curación de datos: Alder Luis León Brito
Análisis formal: Alder Luis León Brito
Investigación: Alder Luis León Brito
Metodología: Alder Luis León Brito
Recursos: Alder Luis León Brito
Software: Alder Luis León Brito
Validación: Alder Luis León Brito
Visualización: Alder Luis León Brito
Redacción – borrador original: Alder Luis León Brito
Redacción – revisión y edición: Alder Luis León Brito
Financiación:
Sin fuente financiera.