La educación médica se desarrolla en constante cambio y está expuesta a disímiles retos. Su objetivo es la suficiencia profesional para el logro de mejores niveles de salud en la población. A pesar de ello existen enfermedades como el cáncer colorrectal aún no controladas. Estimaciones mundiales revelan inequidades en relación con determinantes sociales que inciden en la carga de cáncer en diferentes áreas. El objetivo de este trabajo es definir las diferentes posturas en torno a la contribución de la educación médica al logro de una mayor equidad en la comunidad para optimizar el control del cáncer colorrectal. La equidad en salud posee alta visibilidad y relevancia mundial, y ha sido asociada a un nuevo descriptor, la promoción de salud. Esto reviste gran importancia en el cáncer colorrectal, cuyos factores de riesgo ambientales se relacionan con los determinantes sociales de la salud. Al ser el cáncer colorrectal una neoplasia maligna susceptible de prevención y diagnóstico precoz, se requiere que la educación médica desarrolle competencias profesionales que garanticen la alfabetización sanitaria al respecto a la población, es decir, competencias profesionales en promoción de salud capaces de superar cualquier inequidad de los determinantes sociales de salud. Aunque se ha avanzado en este tema, en algunos países más que en otros, puede hacerse aún más para llegar a todos salvando las inequidades existentes, y a ello mucho puede contribuir la educación médica.