Sr. Editor:
La epidemia VIH/sida es una de las enfermedades emergentes en Cuba; por ello en todas las provincias cubanas se trabaja con mucha fuerza, dedicación y profesionalidad, con respecto a esta problemática. En este contexto, resulta muy importante la publicación del artículo “Epidemia de virus de inmunodeficiencia humana/sida. Cienfuegos, 1986- 20112”, publicado en el pasado número de la revista Medisur, tanto por el significado social que reviste la divulgación de este tema, como por el propio resultado de la investigación realizada.
"El sida desata una cadena de acontecimientos que amenaza con llevar a las sociedades a desmoronarse", expresó Kofi Annan en su informe a la ONU, el 1 de junio de 2005, y añadió: "Pese a los muchos programas y el dinero empleado, la epidemia no ha retrocedido. Los 4,9 millones de infecciones, 3,1 millones de muertes en el 2004, fueron las cifras más elevadas hasta la fecha. Algunas de las peores predicciones se han cumplido. Casi la mitad de los estimados 39,4 millones de personas que viven con el VIH, son mujeres y niñas, casadas o solteras, fieles o promiscuas. Los hombres y mujeres entre quince y veinticuatro años son los más afectados por la epidemia.1
La primera persona infectada con el VIH, en cuba, se detectó a finales de 1985. La epidemia de VIH/sida en Cuba es de baja transmisión, mayormente por contacto sexual y fundamentalmente en hombres que tienen sexo con otros hombres. Las principales provincias con pacientes afectados son las centro occidentales, y hay una baja transmisión perinatal. La epidemia del sida ha mantenido un lento, pero sostenido crecimiento, desde 1996. La prevalencia estimada en población de 15 a 49 años es de 0,07 % y de 0,05 % en el grupo de 15 a 24 años.2
A pesar de contar con un eficiente programa de control del VIH/sida, Cuba no se encuentra exenta de un aumento significativo de la epidemia. En el año 2009 se inicia una reorganización técnica y actualización del programa.
Los datos que aporta el artículo publicado en el volumen 10, número 6 de la revista Medisur son similares a los obtenidos en un estudio, aún no publicado, retrospectivo, de corte longitudinal y descriptivo sobre el comportamiento de la epidemia de VIH/sida en el municipio Pinar del Río que describió la evolución de la epidemia según algunas variables biológicas y sociales durante el período 1988 a octubre 2012. Se mostraron afectados, sobre todo, los pacientes en edades de 20 a 24 y 15 a 19 años; predominó el sexo masculino con 221 pacientes y dentro de ellos los hombres que tienen sexo con hombres (HsH) con un 78 %. El mayor porciento de los estudiados eran solteros y su nivel de escolaridad entre secundaria básica y preuniversitario. El síndrome de desgaste, la neumonía y la neurotoxoplasmosis, resultaron las enfermedades marcadoras más frecuentes pertenecientes a la categoría c de las categorías clínicas.
Consideramos de vital importancia el estudio de esta problemática, que, como refiere el artículo que motivó esta carta, así como nuestra experiencia en la provincia Pinar del Río, muestra una tendencia hacia su crecimiento en nuestro país, razón que justifica que se incrementen cada vez más las acciones de promoción y prevención.