INTRODUCCIÓN
Por determinadas razones comprensibles, la gran mayoría de los médicos que se encuentran en la etapa de la residencia seleccionan para sus proyectos de terminación de la especialidad estudios clasificados como no experimentales.
Al ser un elemento a declarar en los estudios no experimentales, en estos profesionales se observa con cierta frecuencia algún grado de confusión en la identificación del carácter transversal o longitudinal de la investigación que proponen; esta confusión parece emanar de la inculsión de la noción de “tiempo” en el fenómeno que se pretende investigar.
En este trabajo se reflexona acerca de esta situación.
DESARROLLO
Para comprender la situación a que nos referimos, sobre las dificultades para establecer si un estudio es transversal o longitudinal, veamos el siguiente ejemplo real extraido de una sesión de nuestro consejo científico:
Los investigadores se proponían evaluar el resultado de la introducción de una nueva técnica quirúrgica. Esta técnica ya estaba ampliamente validada a nivel mundial e, incluso, ya había sido introducida en otras instituciones hospitalarias del país, con buenos resultados. Para lograr el objetivo, los autores pretendían determinar la evolución clínica de los pacientes intervenidos a los seis meses de realizado el procedimiento y, debido a esto, declaraban que su estudio tenía un carácter longitudinal.
En el camino al esclarecimiento del asunto, recordemos que la consideración de un estudio como transversal o longitudinal obedece a una clasificación que tiene como criterio el número de momentos (o puntos en el tiempo) en el cual se recolectan datos acerca del fenómeno en investigación.(1)
Siempre que la atención del investigador se centre en el comportamiento de un fenómeno en un momento dado estamos en presencia de un estudio transversal; por esta razón, estos estudios son considerados como una “fotografía” del objeto de estudio. En los estudios transversales, se realizarán tantas fotografías como pacientes hayan sido incluidos en la investigación, pero cada paciente recibirá una sola fotografía (por el orden en que vayan entrando al estudio). En el ejemplo utilizado, cada paciente será evaluado una sola vez: a los seis meses, por lo que se trata de un estudio de tipo transversal.
En cambio, la situación pudo haber sido diferente si los investigadores se hubieran propuesto, para la consecución del objetivo, realizar evaluaciones del estado del paciente con una frecuencia mensual durante los seis primeros meses posterior al tratamiento con la nueva técnica quirúrgica. Entonces, cada paciente recibiría seis “fotografías” (una cada mes) en las cuales se observarían o medirían las mismas variables de estudio: grado de limitación funcional, presencia de complicaciones sépticas, presencia de dolor, satisfacción del paciente con la intervención, por solo citar algunos ejemplos.
Y es que la esencia que define la condición de un estudio como longitudinal radica en la existencia de un interés por parte del investigador en los cambios en el tiempo del fenómeno investigado, por lo que requieren al menos dos momentos diferentes en que van a ser obtenidos los mismos datos (o sea, datos correspondientes a las mismas variables) de la investigación.
En la siguiente figura se representan las definiciones de los estudios transversales y longitudinales aplicados a la situación “ejemplo”:
Puede que hayan otras fuentes de confusión pero la utilizada basta para la demostración de cómo operan los conceptos de estudio transversal y estudio longitudinal.
A continuación, para finalizar, se ejemplifica con problemas que deben ser investigados mediante estudios transversales o estudios longitudinales. (Cuadro 1).
CONCLUSIONES
El problema abordado en este punto de vista se ve con mucha frecuencia en los médicos que están realizando su trabajo de terminación de residencia. Es un aspecto a atender pues existe la tendencia a considerar un estudio como longitudinal, solo por el tiempo en que transcurre el estudio, sin tener en cuenta que lo que lo determina es la existencia de un interés por parte del investigador en los cambios en el tiempo del fenómeno investigado, por lo que requieren al menos dos momentos diferentes en que van a ser obtenidos los mismos datos (o sea, datos correspondientes a las mismas variables) de la investigación.
Conflicto de intereses
Los autores declaran no tener conflicto de intereses.
Contribuciones de los autores
Conceptualización: Luis A. Corona Martínez, Mercedes Fonseca Hernández.
Visualización: Luis A. Corona Martínez, Mercedes Fonseca Hernández.
Redacción, revisión y edición: Luis A. Corona Martínez, Mercedes Fonseca Hernández.
Financiación
Hospital General Universitario Dr. Gustavo Aldereguía Lima. Cienfuegos, Cuba.