DESARROLLO
Si bien es cierto que el envejecimiento poblacional es un logro de las ciencias, posee serias implicaciones a la sociedad, al sistema de salud y a la familia.1 La prolongación de la vida, el incremento de la morbilidad y la discapacidad, elevan las demandas de atención a los ancianos en el hogar y la necesidad de servicios. Ellos requieren mayor vigilancia clínica/ humoral que el resto de la población.1, 2
Esto implica una elevación en cantidad y complejidad de las necesidades de asistencia sanitaria que conllevan, en muchas ocasiones, a tensionar los sistemas de salud.1,2 Para los servicios de medicina de laboratorio el reto es superior, con independencia que no se encuentre referenciado con la profundidad y frecuencia requerida. Esta relación involucra por igual a todas las fases del trabajo del laboratorio: preanalítica, analítica y postanalitica.
Fase preanalítica: es la etapa previa a la realización de un análisis de laboratorio, incluye la preparación del paciente, la confección de la solicitud de análisis y los cuidados para la obtención de la muestra.3
En muchos casos el anciano que viva solo o en compañía de otros ancianos con pérdida parcial de su validismo, puede incumplir con algunos de los requerimientos básicos para los estudios diagnósticos, como el ayuno, determinadas limitaciones dietéticas o de medicamentos en días previos al estudio o en la recogida por un periodo de tiempo de muestras biológicas, entre otros.
A su vez, es frecuente en estos pacientes la dificultad en la toma de muestras sanguíneas por un mal acceso venoso, debido a los cambios fisiológicos de la piel y de los vasos sanguíneos por pérdida de las fibras de colágeno y elastina presentes en la mayoría de los ancianos.4
Por su parte los cambios metabólicos en la ancianidad, modifican la absorción y excreción de muchas sustancias que hacen que se incremente el número de interferencias de los analitos con ciertos fármacos. Este aspecto tiene gran importancia en este grupo de personas que consumen varios medicamentos a la vez (polifarmacia).2
Por último, puede verse afectada el acceso a los servicios salud de los ancianos, por existencia de barreras arquitectónicas y de comunicación en instituciones sanitarias e insuficiente disponibilidad de recursos para el transporte y otras necesidades que limiten la realización de estudios complementarios.
Fase analítica: se desarrolla en el interior del laboratorio e incluye la selección, aplicación y evaluación de los diferentes procederes analíticos.3
En la vejez se incrementa la necesidad de monitoreo frecuente de magnitudes biológicas, debido a que el adulto mayor presenta varias enfermedades crónicas al mismo tiempo (multimorbilidad).2,4 Si a ello se agrega que el desarrollo tecnológico de los últimos años ha conducido a una mayor diversidad de estudios complementarios, el resultado final es a un incremento marcado en el número de solicitudes de pruebas al laboratorio y en el volumen de datos biomédicos que este puede brindar.
Este hecho condiciona la necesidad de introducción acelerada de la automatización y la informática en el área de diagnóstico médico, y que exige a su vez, un desempeño superior del personal de salud en las nuevas tecnologías.3
Por otra parte, las pruebas de laboratorio en el hogar cobran cada día mayor representación en las nuevas formas de organización del laboratorio. Estas constituyen un reto en la atención sanitaria actual, en especial para el control metabólico en los ancianos diabéticos.3
Fase post analítica: Etapa en que se confirman los resultados y el laboratorio redacta un informe con los datos obtenidos y que el médico de asistencia debe interpretar.3 Para la correcta interpretación de los resultados, es imprescindible tener en cuenta entre otros elementos, el intervalo de referencia del parámetro que se analice.
Los valores de referencia se obtienen bajo condiciones claramente descritas y estandarizadas. Es usual que estos se establezcan por intervalos edades que excluyen, salvo raras excepciones, a los individuos en edades extremas.
Si tenemos en cuenta que el envejecimiento poblacional actual posee un aumento casi explosivo del grupo de edad conocido como los muy ancianos (con 80 o más años de vida), inclusive se vaticina que este grupo crecerá a una velocidad mayor que la población de 60 años o más de vida,1 entonces, ¿cómo podremos interpretar correctamente los informes de los ensayos en individuos en edades extremas?
CONCLUSIONES
Todo lo anterior descrito indica que se hace imprescindible atender estos nuevos retos sobre los servicios de análisis clínicos, que como parte de la transición demográfica nos impone un horizonte sanitario cambiante. Es indispensable entonces, retomar las mejores prácticas en el ejercicio de la medicina que nuestros maestros nos legaron y centrar la mirada de la medicina de laboratorio, no solo a los elementos clínicos/fisiopatológicos de las enfermedades y a las novedades tecnológicas emanadas de los adelantos de la biología molecular, sino también, incluir el necesario manejo integral del proceso salud/ enfermedad desde la perspectiva de la salud pública como ciencia.