INTRODUCCIÓN
El manejo del trauma torácico ha progresado enormemente en las últimas dos décadas, especialmente por el desarrollo de ayudas diagnósticas como la tomografía computarizada, la ultrasonografía, la resonancia magnética y los rayos X computarizados dinámicos. Además, han influido los avances en cuidados intensivos, la toracotomía de emergencia, la videotoracoscopia, el manejo del dolor y la fisioterapia respiratoria y el apoyo de la terapia con antibióticos.1
En algunos países del primer mundo, los traumatismos de tórax han sido investigados y estudiados a fondo, por lo que los protocolos de conducta a seguir mejoran constantemente, disminuyendo su morbilidad y mortalidad.
En Cuba, los accidentes se ubican dentro de las primeras causas de muerte, y los traumas de tórax, muchas veces asociados a accidentes, representan del 4 al 6 % de los ingresos por traumatismos en los hospitales; su mortalidad es aproximadamente de un 15 % cuando están presentes lesiones de órganos internos del tórax.2,3
En Cienfuegos, a pesar de ser alto el índice de traumatismos torácicos, no se ha realizado una investigación profunda que permita actuar sobre las deficiencias en el diagnóstico y tratamiento adecuados; por lo que se plantea como objetivo de este trabajo caracterizar el comportamiento del trauma torácico en los años 2009, 2010 y 2011, en pacientes atendidos en el Hospital General Universitario Dr. Gustavo Aldereguía Lima.
MÉTODOS
Este es un estudio de serie de casos realizado en el hospital general universitario Dr. Gustavo Aldereguia Lima, de Cienfuegos, durante el trienio comprendido del 1 de enero de 2009 al 31 de diciembre del 2011. Se trabajó con todos los pacientes (184) atendidos por trauma torácico en el Servicio de Cirugía General de la institución.
Se analizaron las siguientes variables: edad, sexo, color de piel, ocupación, lugar del accidente, causa del trauma, zona anatómica afectada, presentación clínica, tratamiento del trauma, estado de los pacientes al egreso y cumplimiento de las buenas practicas clínicas.
Los datos se obtuvieron a partir de la revisión de las historias clínicas de los pacientes y pasados a un modelo recolector de información, hecho para este fin por los autores. Los resultados se presentaron en tablas de números y porcientos. También se requirió información del Registro de Población y Vivienda acerca de la cantidad de habitantes de la provincia, para el cálculo de las tasas anuales de incidencia.
Estos datos se procesaron en sistema SPSS versión 15.0, y los resultados presentados en tablas de números y porcientos.
Este estudio es parte de una tesis de terminación de especialidad en Cirugía General y su proyecto fue discutido y aprobado por el Consejo Científico y el Comité de Ética del Hospital Dr. Gustavo Aldereguía Lima.
RESULTADOS
Las tasas anuales (por 100,000 habitantes) de trauma torácico, fueron de 15,62, 11,86 y 18,87, respectivamente.
El grupo etario más afectado fue el de 31-40 años para ambos sexos, con 40 casos para un 21,7 %. Se observó también una alta frecuencia en el adulto mayor correspondiendo a un 28 % de la muestra. (Tabla 1).
Predominaron las personas con color de la piel negro (45,65 %), de los cuales 76,19 % fueron hombres. (Tabla 2).
Se observaron como los más afectados aquellos pacientes vinculados a alguna actividad laboral (62,5 %), y en edades entre 31 a 40 años. (Tabla 3).
La causa más frecuente de trauma de tórax fueron las heridas por arma blanca (36,4 %), sobre todo en lugares públicos; seguida de los accidentes automovilísticos (26,6 %). (Tabla 4).
Desde el punto de vista de la localización anatómica, se observaron como zonas más afectadas la pleura y el pulmón (41,8 %), provocadas el 37,6 % de ellas por heridas por arma blanca. (Tabla 5).
La presentación clínica más frecuente fue el neumotórax cerrado, seguido del hemoneumotórax, y el hemotórax. (Tabla 6).
El procedimiento más empleado fue la pleurotomía, practicada a 116 pacientes. Solamente un 14 % de los pacientes requirió toracotomía (hemotórax masivos, heridas penetrantes a mediastino y neumotórax complicados con empiema pleural). (Tabla 7).
En términos generales, los pacientes con trauma toráxico fueron atendidos adecuadamente, pues en un 92 % de los casos aproximadamente, se constató la total adherencia a las guías de buenas prácticas clínicas. Se cumplieron de manera parcial en 11 casos (5,9 %) y no se cumplieron en 4 casos (2,1 %).
Egresaron vivos del hospital 165 pacientes; solamente el 10,3 % falleció en el hospital (Tabla 8) con una edad promedio de 54 años. De 19 fallecidos, 13 fueron por heridas por arma blanca, de los cuales a 11 se les realizó toracotomía.
DISCUSIÓN
Los traumatismos torácicos son causa importante de morbilidad y mortalidad, hecho ya demostrado en estudios multicéntricos a nivel internacional, siendo este directamente responsable del 15-25 % de las muertes debidas a traumatismos en general.4,5 Con un diagnóstico precoz y un adecuado manejo terapéutico en el área de urgencias, muchas de estas muertes pueden ser evitadas.
En el presente estudio, el mayor número de pacientes se encontraba en el grupo de edades comprendido entre los 31 y 40 años, resultado que difiere de lo obtenido por el profesor Jiménez, del hospital Domingo Luciani de Caracas, Venezuela, en el cual el trauma torácico predominó en las edades entre 20 y 30 años.4 En estudio realizado en Chile por el profesor Bello,6 también se encontró predominio del trauma torácico en edades inferiores a las encontradas en el estudio realizado en Cienfuegos.
En cuanto al sexo, todos los estudios nacionales e internaciones revisados coinciden en el predominio en los hombres.7-9
Anatómicamente, las zonas más afectadas fueron la pleura y el pulmón, resultado que coincide con estudios realizados a nivel nacional,3,9 e internacional, en Venezuela,10 España11 y Chile.12
Se observó mayor frecuencia de trauma torácico en aquellos pacientes con vínculo laboral (62 %), sin embargo, no se asocia su actividad laboral con la ocurrencia del trauma, pues este tuvo lugar mayormente en lugares públicos; al respecto algunos autores refieren que debido al estilo de vida de la sociedad actual, los trabajadores tienen mayor riesgo de sufrir traumas torácicos.13
En Latinoamérica, los traumas torácicos son producidos en su mayoría por accidentes automovilísticos o por heridas por armas de fuego.14-16
En Cienfuegos las causas predominantes son las lesiones por arma blanca (36,4 %) seguido de los accidentes automovilísticos (26,6 %). Debido a que la posesión de armas en Cuba es muy controlada, el trauma de tórax por arma de fuego es poco frecuente.
La presentación clínica más frecuente es el neumotórax cerrado, seguido del hemoneumotórax y el hemotórax; resultados estos que coinciden con los de estudios realizados a nivel nacional3,13 e internacional.4,6,7,17
En cuanto al tratamiento, se plantea que los traumas torácicos se pueden manejar con procedimientos simples y que solo un 15 % de ellos requieren algún tipo de cirugía compleja,6 lo cual coincide con los resultados de la investigación realizada en la provincia de Cienfuegos, donde solo el 14 % de los pacientes requirió toracotomía para su tratamiento, la cual se realizó en pacientes con hemotórax masivos, heridas penetrantes a mediastino y en neumotórax complicado con empiema pleural.
Se concluye que el trauma torácico en Cienfuegos constituye una de las emergencias más frecuentes en adultos masculinos de 40 a 70 años y generalmente, se debe a lesiones por arma blanca. Su comportamiento difiere en algunos aspectos al compararse con otros países, lo cual está dado por las diferencias en el orden económico y social.