Resumen
El electrocardiograma es una exploración complementaria con alta especificidad, pero con baja sensibilidad. En el caso del paciente con hipertensión arterial es de gran importancia en el diagnóstico, pronóstico y para el seguimiento durante el tratamiento. La prevalencia de hipertrofia ventricular izquierda observada por electrocardiograma en el paciente hipertenso, se ha reportado, hasta en un 9 %. Se han descrito diferentes índices para la aproximación al diagnóstico de la hipertrofia ventricular izquierda, entre ellos el índice de Sokolow y el de Cornell. Las arritmias auriculares y ventriculares, ambas, están consideradas comorbilidad de la hipertensión arterial. Los mecanismos implicados son varios e incluyen la hipertrofia ventricular izquierda y la isquemia miocárdica. En el paciente que padece de hipertensión arterial es frecuente encontrar complejos auriculares prematuros y está incrementado el riesgo de padecer fibrilación auricular, fundamentalmente en pacientes mayores de 65 años, la predisposición de los pacientes con hipertensión arterial a presentar episodios de fibrilación auricular paroxística puede ser determinada por la medición manual de la onda P con su duración máxima, mínima y la dispersión de ella. Los mayores valores de dispersión de la onda P en la lectura de un electrocardiograma de superficie de 12 derivaciones se ven más relacionados con los eventos de fibrilación auricular paroxística. El riego se ve incrementado en aquellos pacientes con valores de onda P máxima de hasta 134 ms y dispersión de la onda P de hasta 46 ms.
Palabras clave
electrocardiografía; hipertensión; onda P
Editada en la Universidad de las Ciencias Médicas de Cienfuegos. Directora: Dr.C Dunia María Chavez Amaro