Un equipo de médicos austriacos ha conseguido que un paciente coja objetos con su mano izquierda paralítica gracias a ordenadores que puede controlar mentalmente, según informó la Universidad de Graz (Austria). Electrodos situados en la cabeza del paciente captan impulsos eléctricos del cerebro y los transmiten a un ordenador que analiza el movimiento deseado. Posteriormente, trasmite los impulsos eléctricos a los músculos para activarlos, explicó el Prof. Gert Pfurtscheller, que dirige el Instituto Técnico Eléctrico y Biomédico de la Universidad de Graz. "Se trata de una primicia mundial. Hemos conseguido combinar por primera vez una tecnología de comunicación entre el cerebro y un ordenador con una tecnología de electroestimulación funcional muscular", afirmó este investigador. El joven parapléjico de 22 años, se rompió la columna vertebral en un accidente hace 5 años. Quedó parapléjico, por lo que se mueve mediante una silla de ruedas, pero puede mover su brazo izquierdo, gracias a uniones nerviosas aún intactas, pero no su mano ni sus dedos, explicó su médico. Tras meses de entrenamiento y puesta a punto del aparato, Thomas ha logrado "atrapar con su mano izquierda un objeto y soltarlo, comer y beber", añadió el médico que lo atiende, cuya experiencia se documentó recientemente en la revista europea "Neuro-Science Letters". La principal dificultad fue "seleccionar entre los numerosos impulsos simultáneos del cerebro el del movimiento deseado", añadió Pfurtscheller. "Thomas tuvo que entrenarse dos veces por semana durante cuatro meses para emitir una señal fuerte del cerebro que produjera el movimiento querido y, paralelamente, el ordenador tuvo que aprender a reconocer la señal correcta", añadió. Por el momento, "sólo se trata de un movimiento de apertura y cierre de la mano izquierda", practicado únicamente en el laboratorio por el peso de los materiales requeridos, precisó este experto. Un proyecto de investigación con Estados Unidos pretende desarrollar en cuatro años una tecnología similar pero suficientemente ligera para acompañar al paciente. Se trataría de electrodos implantados directamente en el cerebro para enviar ondas de señales a un ordenador portátil, concluyó el investigador. |