Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El ministro de Salud de El Salvador, Herbert Betancourt, decretó el viernes una situación de alerta en el país, por un nuevo brote de dengue clásico y hemorrágico. El funcionario dijo que la medida se ha adoptado ante el incremento del índice larvario del mosquito transmisor. Informó que en muchos municipios del área metropolitana de San Salvador, el índice larvario de zancudos supera hasta cinco veces el 4%, considerado como "normal" por las autoridades de Salud. "En Ilopango, Mejicanos, se tiene un índice larvario de más del 35%, y Aguilares pasa del 40%, por la poca colaboración que ha habido con las alcaldías de esos lugares", apuntó el funcionario.

De enero hasta la fecha se han reportado en El Salvador 75 casos de dengue hemorrágico y 1 365 de la variante clásica de la enfermedad, que ya ha cobrado la vida de cuatro personas, detalló Betancourt. En el 2002, El Salvador afrontó una epidemia de dengue que cobró diez vidas, y contagió a 4 410 personas con esa enfermedad, y otras 370 con la variante hemorrágica. El dengue es una enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti o "zancudo patas blancas". Su variedad clásica es la más benigna y la hemorrágica puede llegar a ser mortal.

Agregó que con la alerta, el Ministerio de Salud iniciará una "fuerte campaña de fumigación, eliminación de criaderos de zancudos, entrega de abate, y toma de conciencia de la población". En la campaña participarán unos 400 trabajadores del Ministerio de Salud, Educación, efectivos del ejército y personal voluntario, y tendrá un costo cercano al millón de dólares, informó el funcionario.

El Salvador también padece una epidemia de neumonía, por la que han muerto, desde enero pasado hasta la fecha, 352 personas, y se han contagiado 74 617. Además, el país sufre un brote epidémico de conjuntivitis, que ha afectado a más de 129 000 personas.