Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Niños y adolescentes sufren las mismas formas de victimización que los adultos, pero también algunas específicas, como la negligencia, el abuso sexual o el secuestro parental. Por ello, la literatura científica afirma que esta población presenta una mayor vulnerabilidad a la violencia y a sus efectos adversos. Ahora, una nueva investigación establece la incidencia con la que los españoles sufren violencia a lo largo de la infancia.

Un   trabajo realizado por  investigadores españoles y  publicado en  “Child Abuse & Neglect; analiza una muestra de  mil 107 adolescentes españoles (590 varones y 517 hembras), seleccionados de forma aleatoria en siete centros de educación secundaria.

Tenían una edad comprendida entre 12 y 17 años, y se les aplicó el cuestionario de victimización juvenil, que engloba seis módulos de victimización: violencia por delitos comunes (hurtos, robos, vandalismo), por parte de cuidadores (maltrato físico, abuso emocional, secuestro parental), de iguales y hermanos o hermanas (acoso escolar, violencia en el noviazgo), sexual (abuso o agresión sexual, exhibicionismo), exposición a violencia (entre progenitores, de progenitores a hermanos, violencia comunitaria) y electrónica (acoso, solicitudes sexuales).

Los resultados revelan que un 83 % de los adolescentes manifestó haber sido víctima de al menos una de las formas de violencia evaluadas a lo largo de su vida, y un 68, 6 % en el último año. Un 61,5 % manifestó haber sido víctima de un delito común y la victimización por parte de cuidadores afectó a un 25,3 %. El 48, 8 % de los jóvenes sufrió victimización por parte de sus iguales y hermanos o hermanas, y un 8,7 %, violencia sexual. Finalmente, el 12,6 % había sido víctima de acoso electrónico.

Por sexos, se encontraron diferencias significativas en las formas de violencia: los varones son víctimas de un mayor número de delitos comunes (68 %), mientras que en las féminas se producen más casos de abuso emocional por parte de sus cuidadores (23 %), victimización sexual (13,9 %) y victimización electrónica (17,6 %).

Febrero 19 / 2015 (SINC)