Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La Organización Mundial de Comercio (OMC) aprobó finalmente el sábado, después de cinco días de intensas negociaciones, un acuerdo vital para los países pobres, en virtud del cual podrán acceder a los medicamentos genéricos para luchar contra las enfermedades infecciosas.



"Es un acuerdo histórico para la OMC -declaró el director general de la organización, Supachai Panitchpakdi-. La última pieza del puzzle ha sido colocada en su lugar, permitiendo a los países pobres utilizar plenamente la flexibilidad de los reglamentos de la OMC en materia de propiedad intelectual para tratar las enfermedades que devastan sus poblaciones", añadió con satisfacción.



Panitchpakdi rogó insistentemente a los 146 países miembros de la OMC que se pusieran de acuerdo y subrayó que la "credibililidad de la organización" estaba en juego. Concretamente, los países pobres podrán importar más fácilmente medicamentos genéricos a buen precio si no pueden fabricarlos por sí mismos. Esta decisión es particularmente importante para los países pobres afectados por graves enfermedades endémicas, como la malaria, la tuberculosis o el sida.



El acceso a los medicamentos a bajo precio es una cuestión de vida o muerte para los cerca de 30 millones de africanos que padecen el sida, según cifras de la ONU.



El acuerdo estuvo a punto de ser aprobado el pasado mes de diciembre, pero fue bloqueado en el último momento por Estados Unidos, presionado por su industria farmacéutica, que temía que se ampliase este acuerdo a otras enfermedades, como la obesidad o la impotencia, y desaparecieran así fuentes importantes de ingresos.



Las negociaciones, reanudadas en Ginebra, entraron en una fase decisiva esta semana, quince días antes del comienzo de la Conferencia Ministerial de la OMC en Cancún (del 10 al 14 de septiembre).



Un compromiso elaborado por cinco países fue sorprendentemente rechazado la semana pasada por el conjunto de los países miembros, después de la oposición de Filipinas y de algunos países pobres. Las negociaciones, que se reanudaron el sábado, concluyeron finalmente con la aprobación del compromiso.



Para la embajadora de Kenia, Amina Chawahir Mohamed, este acuerdo "es una buena noticia para África, especialmente para los países africanos que necesitan desesperadamente acceder a medicamentos que estén a su alcance".



En una primera reacción, las organizaciones humanitarias Intermón OXFAM y Médicos Sin Fronteras (MSF) celebraron, aunque con reservas, la aprobación de este acuerdo. En un comunicado, las ONG indican que el acuerdo sólo aporta algunos elementos positivos a los países pobres y preserva los intereses de la industria farmacéutica de los países ricos.



"El acuerdo de hoy sigue las pautas de lo que querían Estados Unidos y su industria farmacéutica. Lamentablemente, sólo aporta un pequeño consuelo a los pacientes pobres, ya que las normas de las patentes seguirán elevando el precio de los medicamentos", indica el comunicado conjunto.