Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Era sabido que la bacteria Helicobacter pylori produce una citotoxina, llamada VacA, que induce la vacuolización de las células epiteliales. Ahora, un estudio publicado en 01CScience01D indica que esta citotoxina puede también bloquear la activación y proliferación de los linfocitos T, un hallazgo que podría explicar el carácter crónico de las infecciones causadas por este microorganismo.



En su trabajo, los científicos del Instituto Max von Pettenkofer de la Universidad de Munich (Alemania) analizaron linfocitos T infectados con cepas salvajes de H. Pylori o con cepas a las que les faltaba la carga genética de citotoxinas como la VacA y la CagA. Los autores observaron que cuando la VacA estaba presente se producía una inhibición de la activación y la proliferación de los linfocitos T. Parece ser que la VacA induce un arresto de un ciclo celular específico, interfiriendo el canal de señalización de la interleucina 2 a través del bloqueo de la enzima calcineurina y disminuyendo la transcripción de esa citocina.



Según los autores, los resultados del estudio sugieren que la VacA bloquea 01Ca larga distancia01D y de una forma efectiva la activación y proliferación de los linfocitos T en el entorno gástrico, y apuntan a que este mecanismo de inmunosupresión local de la bacteria, clasificada como carcinógeno, puede ser un instrumento importante para la inducción de tumores.



Science 2003;301:1099-1102