Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El tratamiento con la terapia hormonal sustitutiva (THS), si se adapta a las necesidades individuales de una mujer, podría ser seguro durante la menopausia, según un informe presentado en el World Congress on Menopause, celebrado en Roma (Italia).

"Hay evidencias bastante convincentes de que a las mujeres jóvenes y sanas les va bastante bien, y las beneficia de varias formas", aseguró el Dr. Roger Lobo, de la Columbia University (Estados Unidos) y miembro del grupo de trabajo que actualizó las directrices sobre la THS para la Sociedad Internacional de Menopausia. 

Las recomendaciones podrían ayudar a resolver la controversia que surgió en 2002 después de un alarmante informe de la Iniciativa de salud de la mujer (WHI). Ese estudio, que comenzó como un ensayo de prevención de la enfermedad cardíaca, concluyó que la THS no protegía al corazón y que sus riesgos eran mayores que los beneficios para la prevención de la enfermedad crónica.

Pero cuando el grupo de redacción de la sociedad de la menopausia revisó el WHI, concluyó que la THS es por lo general segura para la mayoría de mujeres en el momento de la menopausia.

Además, al aliviar los molestos síntomas menopáusicos, como los sofocos y la resequedad vaginal, la THS podría mejorar la calidad de vida y la sexualidad, señaló el Dr, Lobo. También podría ayudar a prevenir la osteoporosis y el cáncer de colon, dijeron los autores. "Y en estas mujeres de menos de 60 años, hay evidencia temprana de que también hay un beneficio cardíaco", afirmó el Dr. Lobo.

Las recomendaciones actualizadas, que aparecen en la revista Climacteric, también instan a las mujeres tratadas con THS a revisar la decisión anualmente con su médico, y a suspender el tratamiento cada pocos años para ver si los síntomas regresan.

Se aconseja un uso a corto plazo, justo el tiempo necesario para aliviar los síntomas, y con la dosis más baja que los alivie.

Un motivo del cambio es que la edad promedio de las participantes del estudio anterior fue de 63 años, típicamente tras el final de los síntomas menopáusicos, y un momento poco usual para iniciar el reemplazo hormonal.

"La THS sigue siendo la terapia más eficaz para los síntomas vasomotores como los sofocos y la atrofia urogenital, que incluye la sequedad vaginal", según el informe. "Otras quejas relacionadas con la menopausia, como dolores articulares y musculares, cambios en el estado de ánimo, molestias del sueño y disfunción sexual (lo que incluye una menor libido) podrían mejorar durante la THS", continuaron los autores.

Los riesgos y efectos secundarios potenciales aumentan con la edad, dijeron los expertos. Así que las mujeres que han alcanzado la menopausia hace muchos años deben ser especialmente cautas, aunque para algunas de ellas la THS a largo plazo podría resultar segura, apuntó el Dr. Lobo.

La forma combinada de THS, que incluye estrógeno y progesterona, aumenta ligeramente el riesgo de cáncer de mama. Es probable que las mujeres con antecedentes familiares de cáncer de mama no deban tomarla.