Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un equipo de científicos italianos ha inventado un nuevo método para el diagnóstico precoz del cáncer de pulmón, el peor de todos por su difícil detección, que podría salvar miles de vidas, según ha publicado la revista médica británica "Lancet".



Este tipo de cáncer es la causa de 1,3 millones de muertes cada año en todo el mundo, lo que convierte a esta enfermedad en el cáncer más letal. En España es, junto con el de mama, el más común.



Además, se trata del tumor maligno de peor pronóstico, debido a que se descubre tarde y, por consiguiente, muy avanzado, por lo que sólo un 10 por ciento de los casos detectados en Europa sobreviven más de cinco años.



Además, la tomografía computerizada a través de rayos X, uno de los métodos más utilizados para tratar de descubrir si una persona padece cáncer pulmonar, no es muy fiable, según los especialistas.



Sin embargo, según el estudio hecho por los científicos del Instituto Nacional de Cáncer de Milán (Italia), combinar la tomografía computerizada con otra técnica llamada tomografía por electrones positivos podría detectar el cáncer con gran antelación.



La tomografía por electrones utiliza rastreadores radiactivos colocados en el cuerpo para estudiar la actividad metabólica, explican en "Lancet" los autores, que experimentaron con la "técnica combinada" al aplicarla a mil fumadores.



Las personas objeto de la investigación tenían 50 años de edad o más y habían fumado un mínimo de 26 cigarrillos al día durante un mínimo de 37 años.



Después de dos años de estudio, el equipo de investigadores italianos lograron diagnosticar 22 casos de cáncer y descubrieron lesiones en los pulmones de 298 pacientes, un 29 por ciento del grupo.



La tomografía por electrones positivos -explican los expertos- se utilizó para clasificar, como benignos o malignos, los nódulos encontrados en el pulmón y se confirmaron 18 casos positivos de cada 20.



Gracias al diagnóstico precoz, la extracción de los tejidos malignos se consiguió en un 95 por ciento de los casos, de modo que los científicos concluyen que el uso combinado de ambas técnicas, "efectivamente, detecta antes el cáncer de pulmón".