Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La angioplastia primaria es mejor que la fibrinolisis para el infarto agudo de miocardio (IAM), incluso cuando el paciente es derivado de un hospital a otro con posibilidad de llevar a cabo este procedimiento invasivo, siempre que ocurra dentro de las dos primeras horas, según un artículo publicado en 01CThe New England Journal of Medicine01D.



Es la conclusión principal del estudio danés DANAMI-2 (Danish Multicenter Randomized Study on Fibrinolytic Therapy versus Acute Coronary Angioplasty in Acute MI), en el que participaron más de 1.572 pacientes con IAM aleatorizados a recibir angioplastia o tratamiento trombolítico con alteplasa intravenosa, de los que 1.129 fueron enrolados en hospitales de referencia y 443 en centros que aplicaban prioritariamente angioplastia.



El objetivo primario del estudio estaba compuesto por muerte, evidencia clínica de reinfarto o ictus incapacitante a los 30 días. Entre los pacientes tratados en centros de referencia, este objetivo se cumplió en el 8,5% de los tratados con angioplastia y el 14,2% de los que recibieron fibrinolisis (p=0,002), mientras que en los centros 01Cinvasivos01D estos porcentajes fueron 6,7% y 12,3%, respectivamente. Además, independientemente del tipo de centro, una menor tasa de reinfarto se asoció a mejores resultados tras angioplastia (1,6%) que tras fibrinolisis (6,3%). No existieron diferencias significativas entre los grupos de tratamiento en los índices de mortalidad (6,6% y 7,8%) e ictus (1,1% y 2,0%).



Los autores remarcan que 01Cuna estrategia de reperfusión que incluya la derivación de los pacientes a un centro con tratamiento invasivo mediante angioplatia es mejor que la fibrinolisis in situ, siempre que ese transporte se realice dentro de las dos primeras horas01D. Y añaden que 01Cel beneficio de la angioplastia primaria depende del volumen de procedimientos y del nivel de experiencia de los médicos que la aplican01D.



New England Journal of Medicine 2003;733-742