Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El filtrado y eliminación de los leucocitos de la sangre 013leucorreducción- es en la actualidad uno de los campos más controvertidos de la medicina transfusional, debido a la disparidad de los resultados de los estudios orientados a conocer sus beneficios y al coste económico del procedimiento.



Esta indefinición hace que no exista una normativa unificada al respecto en todo el mundo. Mientras que en Canadá y la mayoría de países europeos, por ejemplo, es obligatoria la leucorreducción, sólo una parte de la sangre empleada en transfusiones ha pasado por este procedimiento en Estados Unidos.



Para evaluar los beneficios de la leucorreducción sobre la salud de los enfermos transfundidos, investigadores del Centro de Investigación en Transfusiones de la Universidad de Ottawa (Canadá) evaluaron el estado de salud de 6.900 canadienses que recibieron transfusiones antes de la obligación legal de leucorreducción en las donaciones de sangre y de otros 7.804 después de la aprobación de la ley. Todos los participantes habían recibido transfusiones por cirugía cardiaca, artroplastias de cadera, cuidados intensivos después de cirugía o traumatismo grave.



Los resultados del estudio, publicado en 01CJAMA01D muestran que los que recibieron sangre con leucorreducción tuvieron un menor riesgo de muerte, fiebre y empleo de antibióticos. Además, los niños con bajo peso al nacer que recibieron sangre que había superado el procedimiento presentaron un menor número de enfermedades ligadas a la prematuridad.



De acuerdo con la Cruz Roja Americana, la leucorreducción supone un coste añadido de 30 euros en cada unidad de sangre. Esta entidad, que recoge y distribuye la mitad de las donaciones de sangre en Estados Unidos, recomienda la leucorreducción universal y, en junio de 2002, el 95% de las partidas de hematocitos distribuidas a hospitales eran ya 01Cleucorreducidas01D.