Cada vez más hombres con cáncer de próstata que optan por la extirpación quirúrgica de la glándula eligen la prostatectomía laparoscópica menos invasiva que el procedimiento tradicional o "radical". Pero un estudio demuestra que los hombres tratados con la cirugía laparoscópica tienen más riesgo de sufrir ciertas complicaciones, como disfunción eréctil e incontinencia urinaria. En la prostatectomía tradicional abierta, que es el procedimiento de primera elección, se hace una incisión en la parte baja del abdomen para extirpar la próstata, que está ubicada en la pelvis detrás del hueso púbico. El uso del procedimiento laparoscópico menos invasivo, en especial con asistencia robótica, creció drásticamente en los últimos años del 1 al 40% de todas las prostatectomías radicales del 2001 al 2006, según artículo publicado en la Journal of the American Medical Association (JAMA). Este incremento rápido se registró a pesar de los pocos datos disponibles sobre resultados y costos más altos que el procedimiento tradicional de primera elección. El equipo del doctor Jim C. Hu, del Brigham and Women's Hospital, en Boston, comparó los resultados de 1938 hombres con cáncer de próstata sometidos a cirugía laparoscópica y en 6899 hombres tratados con cirugía convencional. Los participantes atendidos con cirugía laparoscópica abandonaron antes el hospital, fueron menos propensos a necesitar transfusiones y tenían menos riesgo de sufrir complicaciones posquirúrgicas respiratorias y misceláneas. Sin embargo, fueron más propensos que los operados tradicionalmente a sufrir incontinencia urinaria y disfunción eréctil. Es interesante que los pacientes tratados con la cirugía moderna de alta tecnología fueran más propensos a vivir en regiones con mayor nivel educativo e ingresos, comparado con el grupo tratado con la tecnología más antigua, sostuvo el equipo. JAMA: http://jama.ama-assn.org/ Fuente: Nueva York, octubre 15/2009 (Reuters Health) |