Los programas de vacunación contra la influenza pandémica A(H1N1) están en marcha en Estados Unidos, China y Australia y comenzarán pronto en varias partes de Europa. Mientras las personas aguardan su momento de ser vacunados, aquí se presentan algunas preguntas y respuestas sobre los síntomas de la enfermedad y qué hacer si se padecen antes de recibir la inmunización. ¿Qué es la influenza y cuáles son los síntomas de la A(H1N1)? La influenza es un virus que infecta la nariz, la garganta y los pulmones. La gripe estacional suele causar la muerte de entre 250 000 y 500 000 personas en todo el mundo, en su mayoría personas mayores pero también niños muy pequeños, mujeres embarazadas y pacientes con enfermedades crónicas. La popularmente conocida como gripe porcina A(H1N1) es una nueva cepa que apareció en marzo y se convirtió en pandémica en junio. Como la gripe estacional, la influenza A(H1N1) suele ser leve y no requiere atención médica. Pero la cepa H1N1 también difiere de la gripe estacional porque es más proclive a infectar a los niños y a las personas jóvenes que a los ancianos. La mayoría de los síntomas de la gripe A(H1N1) son los mismos que los de la influenza estacional: fiebre, tos o dolor de garganta, goteo o congestión nasal, dolor de cabeza, malestar corporal, resfríos y fatiga. Pero la gripe porcina también puede provocar vómitos y diarrea. Docenas de otros virus causan síntomas similares, pero una característica clave de la influenza es la aparición repentina de los síntomas. Una enfermedad que se desarrolla gradualmente posiblemente tenga origen en otro virus. ¿Qué ocurre si alguien se enferma? Las personas que se infectan con la cepa A(H1N1) contagiarían desde el día anterior a presentar los síntomas. Dado que la gripe A(H1N1) actualmente es la mayor de las cepas en circulación en el mundo, las autoridades sanitarias consideran que cualquier persona con influenza debería tratarse como si tuviera el tipo pandémico. Las pruebas rápidas no detectarían la cepa A(H1N1), por lo que se aconseja a los médicos que ni siquiera realicen los exámenes a quienes presentan síntomas de gripe. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) recomiendan que las personas con A(H1N1) permanezcan en el hogar y no asistan al trabajo o la escuela, no viajen ni salgan de compras, ni participen en eventos sociales o reuniones públicas hasta por lo menos 24 horas después de que desaparezca la fiebre. Los funcionarios también instan a los enfermos a evitar el contacto con cualquier grupo de riesgo, como las embarazadas, los niños y los bebés, además de las personas con enfermedades crónicas como asma, diabetes mellitus o enfermedad cardíaca. En tanto, también se recomienda el lavado frecuente de manos, cubrirse al toser y estornudar y, en algunos casos, usar máscaras faciales para evitar expandir la infección. Los principales remedios para la enfermedad leve son el descanso, el consumo elevado de líquidos como agua, caldos, bebidas deportivas y brebajes para prevenir la deshidratación en los niños pequeños. ¿Qué sucede si alguien realmente se enferma? Se aconseja atención médica si una persona enferma tiene dificultad para respirar o dolor de pecho, presenta la zona de los labios de color azul o púrpura, vomita y no puede retener líquidos o presenta señales de deshidratación, como mareos. El gobierno estadounidense recomienda que las personas con enfermedades crónicas que entran en contacto con un paciente con A(H1N1) busquen tratamiento con antivirales como el oseltamivir, de Roche AG y Gilead Science comercializados como Tamiflu, o zanamivir, una medicina inhalable vendida como Relenza por GlaxoSmithKline. Las mujeres embarazadas deben recibir inmediatamente atención especial, dado que siempre corren más riesgo ante la gripe y especialmente la A(H1N1). Los padres deberían buscar especialmente tratamiento para sus hijos con síntomas de gripe que no pueden despertar con facilidad, que tienen apariencia azulada o gris, o que vuelven a enfermar después de mejorar. Este último síntoma indicaría la presencia de una infección bacteriana secundaria que puede ser más seria después de padecer influenza. Fuente: Washington, octubre 8/2009 (Reuters) |