Un nuevo estudio sugiere que las mujeres que comienzan a formar sus familias tempranamente y las que tienen muchos hijos pueden presentar alto riesgo de desarrollar cáncer renal, el más frecuente, carcinoma de células renales. El carcinoma ocurre dos veces más en hombres que en mujeres. Los factores de riesgo que inciden en el desarrollo de la enfermedad son la obesidad, la hipertensión arterial y el tabaquismo, pero se desconoce si influyen las hormonas sexuales. Para investigarlo, el equipo de Jung Eun Lee, de la Escuela de Medicina de Harvard, en Boston, estudió a 118 219 mujeres participantes en Nurses' Health Study; 247 de ellas recibieron diagnóstico de cáncer de células renales entre los años de 1976 al 2004. Las mujeres con más hijos tenían más riesgo de desarrollar carcinoma de células renales, con un 10% de aumento por cada hijo. Se, observó que cuanto más tarde una mujer tenía a su primer hijo, menos propensa era a que se le diagnosticara la enfermedad; demorar la maternidad a los 28 años o después redujo el riesgo un 34%, a diferencia de las mujeres que habían tenido su primer hijo a los 22 años o menos. No hubo relación entre el uso de hormonas después de la menopausia o de píldoras anticonceptivas y el riesgo de la enfermedad, según artículo publicado en la revista American Journal of Epidemiology. Según los investigadores, es posible que el embarazo aumente el riesgo de desarrollar carcinoma de células renales al generar estrés sobre los riñones, la infección urinaria es también más frecuente durante el embarazo. Los riñones son un poco más grandes durante la gestación, lo que provoca que sean más vulnerables al estrés oxidativo y a la inflamación. Los cambios en los niveles de estrógeno y progesterona que ocurren en los embarazos múltiples modifican el riesgo de la afección. El uso de la terapia hormonal o los anticonceptivos orales no estuvo asociada con la aparición de carcinoma de células renales. Fuente: Nueva York, mayo 27/2009 (Reuters) |