Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Según un estudio internacional, un medicamento que obstruye una enzima relacionada con la acumulación del colesterol no reduce el avance de la aterosclerosis, el engrosamiento y endurecimiento de las arterias, pero aumenta el riesgo de eventos cardiovasculares de importancia.
Los investigadores evaluaron la seguridad y la eficacia de la pactimiba, que inhibe una enzima conocida como ACAT, en 892 personas que tenían antecedentes familiares de hipercolesterolemia, que se relaciona con mayor riesgo de aterosclerosis. Los participantes, de 40 clínicas de Estados Unidos, Canadá, Europa, Sudáfrica e Israel, fueron elegidos aleatoriamente para tomar 100 miligramos diarios de pactimiba o un placebo, además de la terapia antilipidémica estándar.
Los investigadores evaluaron la aterosclerosis de los pacientes al comienzo del estudio, 12, 18 y 24 meses después con ultrasonido para medir el grosor íntima-media de la carótida (GIMC), una medida del grosor de las paredes internas de una arteria principal. Incrementar el grosor indica incrementar la placa en la arteria.
Luego de seis meses, los niveles de colesterol de lipoproteína de baja densidad (LDL), colesterol “malo”, habían aumentado en un 7,3% entre quienes tomaban pactimiba y en 1,4% entre los que tomaron el placebo. Este aumento desapareció luego de que los participantes dejaran de tomar el medicamento.
El estudio halló que no hubo diferencias entre los dos grupos en el avance de la GIMC máxima, pero la GIMC promedio aumentó significativamente en el grupo de la pactimiba en cuestión de un año, en comparación con el avance menor del grupo que ingirió placebo.
En comparación con los pacientes del grupo que ingirieron el placebo, los del grupo de pactimiba sufrieron eventos más graves (10% en comparación con 7,7%) y más eventos cardiovasculares (6,3% en comparación con 3,4%) y tuvieron índices más altos del compuesto de muerte cardiovascular, ataque cardíaco y accidente cerebrovascular (2,3% en comparación con 0,2%).
La Dra. Marijn C. Meuwese, del Centro médico académico de Ámsterdam (Países Bajos) y sus colegas escribieron que entre quienes tienen antecedentes familiares de hipercolesterolemia, “la pactimiba no tuvo efectos sobre la aterosclerosis como lo evalúan los cambios en la GIMC máxima comparada con un placebo, pero se relacionó con un aumento en la GIMC promedio y con un aumento en la incidencia de eventos cardiovasculares importantes”.
Los hallazgos de éste y de estudios anteriores reducen “la promesa y el desarrollo futuro de este tipo de medicamentos (inhibidores de la ACAT) para la prevención cardiovascular”, concluyeron los autores en su investigación publicada en la Journal of the American Medical Association (JAMA).
JAMA: http://jama.ama-assn.org/


Fuente: Nueva York, marzo  17/2009 (HealthDay News)