Las personas han sido bien concientizadas de los daños que causa la diabetes mellitus en el corazón, los ojos y los riñones, y ahora nuevas investigaciones señalan un grave riesgo: incrementa las posibilidades de padecer enfermedad Alzheimer. Desde hace tiempo los médicos sospechan que la diabetes mellitus afecta los vasos sanguíneos que alimentan el cerebro. Y ahora parece ser aún más insidiosa, dado que el daño podría iniciarse antes de que la diabetes mellitus sea diagnosticada plenamente, cuando el cuerpo empieza a perder la capacidad de controlar los niveles de azúcar en la sangre. De hecho, parece haber cada vez menos diferencia entre lo que los médicos califican como “demencia vascular” y la forma común del Alzheimer. Independientemente de cómo se le denomine, ese problema de salud es razón más que suficiente para controlar la diabetes mellitus y los riesgos cardíacos que conlleva. “En la actualidad no podemos hacer mucho contra la enfermedad de Alzheimer, esas placas adhesivas que congestionan el cerebro de los pacientes”, dijo el doctor Yaakov Stern, especialista en Alzheimer del Centro Médico de la Universidad de Columbia. Pero, si se pudieran controlar esas condiciones vasculares, uno podría hacer menos aceleredado el desarrollo de la enfermedad. El vínculo tiene fuertes implicaciones desde el punto de vista social. Más de cinco millones de estadounidenses padecen Alzheimer y se espera un aumento abrumador en los casos a medida que la población envejece. Tanto la epidemia de diabetes mellitus tipo 2, alimentada por la obesidad, puede aumentar la cifra de problemas de demencia. Hay cerca de 18 millones de personas con diabetes mellitus tipo 2 que tendrían un riesgo dos o tres veces mayor de desarrollar Alzheimer que los no diabéticos. Aún así, la tipo 2 suele causar enfermedades cardíacas y otros problemas que pueden causar la muerte antes de que se manifieste el Alzheimer, alrededor de los 70 años. La recomendación es no caer presa del pánico, señala el doctor Ralph Nixon de la Universidad de Nueva York, vicepresidente del consejo de asesoría científica de la Asociación contra el Alzheimer, ya que los factores genéticos son el principal factor de riesgo para el advenimiento de la demencia. Fuente: Washington, marzo 16/2009 (AP) |