Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un equipo de investigadores del centro Médico de la Universidad de Chicago ha comprobado que una hora extra de sueño por noche parece disminuir los riesgos de la calcificación de las arterias coronarias, una etapa temprana en el proceso que lleva hacia las enfermedades cardiovasculares.
El beneficio de una hora de sueño adicional fue comparable a los beneficios con una reducción de 17 mm Hg de la presión sanguínea sistólica.
Cerca del 12% de los participantes en el estudio (voluntarios con buena salud en su cuarta década de vida) experimentaron por vez primera la calcificación de las arterias coronarias durante los primeros cinco años del seguimiento.
Las arterias calcificadas, sin embargo, se encontraron en el 27% de aquellos que dormían menos de cinco horas diarias por noche y el porcentaje era de un 11% en quienes dormían entre cinco y siete horas diarias por noche, y de tan sólo un 6% en quienes dormían más de siete horas por noche.
Los beneficios del sueño parecen ser mayores para las mujeres, pero no se encontraron diferencias en cuanto a la raza.
La coherencia y la magnitud de las diferencias fueron toda una sorpresa, explicó Diane Lauderdale, directora del estudio, del Centro Médico de la Universidad de Chicago.
"También hay algo de misterio, alertó, y sólo podemos especular sobre el por qué aquellos con menos horas promedio de sueño nocturno tienen más probabilidades de desarrollar calcificación de las arterias coronarias".
Estudios recientes han sugerido que la privación parcial crónica de sueño puede ser un factor de riesgo para un conjunto de problemas médicos comunes, incluyendo el aumento de peso por encima de lo saludable, la diabetes mellitus y la hipertensión arterial.
Éste es el primer estudio en relacionar de manera objetiva la duración del sueño con un marcador pre clínico de las enfermedades del corazón.
Los autores sugieren tres posibles mecanismos por los que dormir poco puede estar relacionado con la calcificación: Primero, puede existir algún factor todavía desconocido que sea capaz de reducir tanto la duración del sueño como la calcificación, segundo, aunque la presión sanguínea medida durante los exámenes no parece explicar la asociación, esta por regla general disminuye durante el sueño, por lo que la promedio (en 24 horas) de aquellos que duermen menos puede ser mayor, lo que podría contribuir de modo significativo a la calcificación.
Finalmente, el estrés, o más concretamente una hormona asociada al estrés, como el cortisol (que se ha podido relacionar con una disminución de las horas de sueño y con el aumento de la calcificación), podría estar desempeñando su papel.
Los datos sobre los niveles sanguíneos de cortisol no estaban disponibles para todos los participantes en el estudio.


Fuente: Chicago, marzo  12/2009 (Reuters)