Un nuevo sistema para calcular la dosis adecuada del anticoagulante warfarina para cada paciente podría ayudar a los médicos a prevenir el desarrollo de peligrosos coágulos sanguíneos y hemorragias graves. Algunos pacientes necesitaron más del doble de la dosis semanal que otros, según demuestran nuevos estudio y test que predijeron mejor quiénes requerían más y quiénes menos. Aplicar la dosis adecuada de warfarina es crucial. El fármaco, comercializado bajo marca como Coumadin, se basa en un veneno para ratas y puede prevenir los coágulos sanguíneos. Pero con una dosis demasiado elevada el paciente puede desangrarse hasta fallecer, mientras que con una cantidad muy pequeña pueden generarse accidentes cerebrovasculares (ACV) o ataques cardíacos debido a la formación de coágulos. El equipo de investigadores internacionales dirigidos por la doctora Teri Klein, de la Stanford University en California, tomó información clínica y genética de 4043 pacientes para crear un algoritmo por computadora y predecir quiénes necesitarían una dosis mayor o menor de la medicina. El nuevo enfoque es denominado farmacogenética y emplea las variaciones en los genes de los pacientes para prever su respuesta a los medicamentos. En un artículo publicado en New England Journal of Medicine (NEJM), los investigadores indicaron que evaluaron el nuevo sistema en otras 1009 personas. “El algoritmo identificó con precisión a una mayor proporción de pacientes que requerían 21 miligramos de warfarina o menos por semana y quienes necesitaban 49 miligramos o más cada semana”, escribieron los investigadores. Cada año se realizan sólo en Estados Unidos alrededor de 30 millones de recetas de warfarina. Para analizar el tiempo de coagulación y encontrar la dosis correcta se efectúan pruebas sucesivas. La dosis más segura para una persona podría ser 10 veces mayor a la mejor alternativa para otra. “La farmacogenética tiene el potencial de aumentar los beneficios y reducir el daño en las personas cuyas respuestas a los medicamentos no son promedio”, señalaron en un comentario los doctores Janet Woodcock and Lawrence Lesko, de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA), de Estados Unidos. NEJM: http://content.nejm.org/ Fuente: Boston, febrero 19/2009 (Reuters) |