La operación para tratar la obesidad, conocida como cirugía bariátrica, no solo ayuda a las personas obesas a perder una gran cantidad de kilos, sino que además mejora significativamente o resuelve por completo un problema hepático que suele relacionarse con el sobrepeso. Una revisión de estudios demostró que la enfermedad de hígado graso no alcohólica, muy relacionada con la epidemia de obesidad actual, puede resolverse con una cirugía bariátrica. La prevalencia de la condición se estima en alrededor del 70% de las personas obesas y entre el 85 y el 95% de aquellos sujetos con obesidad mórbida o extrema. Las investigaciones han mostrado que la pérdida de peso lograda mediante la cirugía bariátrica mejora la diabetes y reduce la presión arterial en los individuos obesos. No obstante, sigue siendo poco claro el efecto general del adelgazamiento sobre la enfermedad de hígado graso. Para analizar el tema, el doctor Gagan K. Sood, de la University of Texas Medical Branch en Galveston, y sus colegas recopilaron datos de 15 estudios que habían observado el impacto de la cirugía bariátrica sobre el hígado. "Los resultados generales son alentadores para mejorar la enfermedad hepática asociada con la obesidad", dijo Sood.Como se esperaba, las biopsias hepáticas mostraron que la amplia mayoría de las personas obesas tenían signos claros de enfermedad de hígado graso. La cirugía para la pérdida de peso mejoró o resolvió completamente la condición en la mayoría de los sujetos estudiados, informó el equipo de Sood. Por ejemplo, una forma severa y progresiva de enfermedad de hígado graso no alcohólica, que puede conducir a cirrosis e incluso a cáncer hepático, se presentó inicialmente en 299 de 555 biopsias, es decir el 53,8%. La cantidad de pacientes con mejoras o solución del problema fue del 81,3%, indicaron los autores. Fuente: Nueva York, enero 1/2009 (Reuters Health) |