Las mujeres que toman betacaroteno, vitamina C o E, o una combinación de estos suplementos, tienen un riesgo similar de cáncer que aquellas que no tomar estps antioxidantes, según un estudio de la Harvard Medical School y el Brigham and Women's Hospital de Boston (Estados Unidos), que se publica en el “Journal of the National Cancer Institute”. Los estudios epidemiológicos han sugerido que las personas con dietas ricas en fruta y verdura, y por ello en antioxidantes, podrían tener un menor riesgo de cáncer. Sin embargo, no se han conseguido resultados concluyentes en los estudios realizados para aclarar este supuesto efecto beneficioso. Los científicos, dirigidos por la Dra. Jennifer Lin, evaluaron el impacto de los suplementos de antioxidantes sobre la incidencia del cáncer en un ensayo aleatorio controlado, en el que participaron 7.627 mujeres que tenían un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y que fueron asignadas a tomar vitamina C, vitamina E o betacaroteno. Los investigadores no descubrieron ningún beneficio sobre el riesgo de cáncer derivado del consumo de los antioxidantes después de un seguimiento de más de 9 años. Un total de 624 mujeres desarrollaron cáncer y 176 murieron por esta causa durante dicho período. En comparación con placebo, el riesgo relativo de un nuevo diagnóstico de cáncer fue de 1,11 en mujeres que tomaron vitamina C, 0,93 en las que consumieron vitamina E y de 1 en aquellas que siguieron un tratamiento con betacaroteno. Según explican los autores, estos suplementos no suponen un beneficio en la prevención primaria de la incidencia del cáncer o de la mortalidad derivada de la enfermedad. Los investigadores señalan que ni la duración del tratamiento ni la combinación de los tres antioxidantes tuvo efectos sobre los episodios de cáncer mortales o no. Se recomienda revisar el artículo: Journal of the National Cancer Institute 2008;doi:10.1093/jnci/djn438 |