Dormir menos de 7,5 horas al día puede repercutir en un mayor riesgo de infarto de miocardio en personas de edad avanzada, según un estudio de la Universidad Médica Jichi, de Tochigi (Japón), que se publica en “Archives of Internal Medicine”. Además, los investigadores también muestran en su estudio que una combinación de períodos de sueño entrecortados y de presión arterial elevada durante la noche parece asociarse a un mayor riesgo de la enfermedad cardíaca. Los autores explican que el cambio en los estilos de vida en las sociedades modernas ha dado lugar a que la gente duerma menos. Apuntan, además, la necesidad de dormir de forma adecuada para evitar trastornos de la salud como la obesidad y la diabetes, así como factores de riesgo cardiovasculares, que incluyen los trastornos en la respiración durante el sueño y la hipertensión nocturna. Los autores controlaron el sueño de 1.255 personas con hipertensión que tenían una media de 70,4 años y que fueron seguidas durante 50 meses. Registraron la duración del sueño de los pacientes, su presión arterial durante el día y la noche y los episodios de enfermedad cardiovascular que experimentaron, entre ellos ictus, infarto de miocardio y muerte súbita cardíaca . Descubrieron que dormir menos de 7,5 horas estaba asociado a la incidencia de la enfermedad cardiovascular. "La incidencia de enfermedad cardiovascular fue de 2,4% anual en pacientes que dormían menos de 7,5 horas y de 1,8% anual en pacientes que dormían más. Los que dormían menos horas y presentaban hipertensión nocturna tuvieron mayor riesgo cardíaco que aquellos con sueño normal y sin hipertensión nocturna. Sin embargo, los episodios de enfermedad cardiovascular entre los que dormían más frente a los que dormían menos fueron similares en el caso de los que no presentaban hipertensión por la noche. Los autores concluyen que una menor duración del sueño es un indicador de episodios de cardiovasculares en personas de edad avanzada con hipertensión, en particular cuando se asocia a la hipertensión nocturna. Apuntan que los especialistas deberían preguntar sobre la duración del sueño al evaluar los riesgos de pacientes con hipertensión. Archives of Internal Medicine 2008;168:2225-2231 |