Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El científico estadounidense Eric Green, del programa del genoma humano, opinó el jueves, en Quito, que la farmacología genómica será usual en el 2010, dado el avance que ha tenido el estudio del mapa genético. "Éste es un emblema del nuevo tipo de tecnología que va a encontrar su lugar en los laboratorios clínicos en los próximos cinco o diez años", indicó el científico.

Green participó el jueves en una conferencia sobre El futuro de la genómica: más allá del proyecto del genoma humano, que formó parte del curso internacional Trascendiendo fronteras en Medicina , organizado por la Universidad Internacional del Ecuador y el Hospital Metropolitano de Quito.

El advenimiento de una nueva medicina molecular, además, va a permitir que se afiance en el mundo la terapéutica genómica y una terapia genética, entre el 2010 y el 2020, sostuvo Green. Agregó, en broma y en serio, que llegará un momento en que el médico recetará a su paciente: "tome dos genes -en lugar de aspirinas- y me llama mañana por la mañana". Este proceso también implicará la elaboración de nuevos medicamentos que se suministren entendiendo las bases genéticas; es decir, drogas que interactúen con los elementos genéticos, sostuvo. Se trata -explicó- de "un nuevo tipo de medicina personalizada, sobre la base de las características genéticas de cada paciente01D. Apuntó que se han realizado experiencias en las que se observan a grupos de individuos que han reaccionado más favorablemente a cierto tipo de medicamentos que otros, lo que confirma que cada persona tiene sus características genéticas específicas. "Ya es hora de entender estas variaciones genéticas para que los médicos puedan prescribir a sus pacientes los medicamentos más eficientes", sostuvo Green.

Sin embargo, el desarrollo del estudio genético tiene "un gran pero" en el sentido del uso ético, "no médico", que se dé a las investigaciones, agregó. Green considera a esa fase como un tercer piso en el desarrollo de las investigaciones sobre el genoma humano, pues asegura que la genética no puede estar aislada de la sociedad y sus percepciones éticas, políticas y sociales. Indicó que, por ello, se deben crear normas para asegurar que este tipo de estudios tenga un desarrollo adecuado y éticamente aprobado por la sociedad. Se deberían "aumentar las protecciones legales contra la discriminación genética y definir mejor los límites y las aplicaciones apropiadas del genoma en áreas no médicas", afirmó. "Debemos decidir como sociedad. Si hay cosas que no son adecuadas, no las haremos; hay que definir un marco de referencia de lo correcto para comprender las relaciones entre la genómica, la raza y la etnia", insistió Green.

El científico dijo que también se deben comprender bien "los factores genéticos que afectan el comportamiento humano, que es otra de las áreas de controversia". Finalmente, invitó a los científicos ecuatorianos y de todo el mundo a participar de las investigaciones sobre el genoma humano a través de la red Internet, en el portal www.genome.com, que contiene "muchas cosas útiles", anotó.