Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Científicos de la Wayne State University han ensayado en ratones una vacuna contra el cáncer de mama y muestran haber eliminado por completo tumores HER2-positivos, incluso tumores resistentes a la actual terapia anti-HER2.

Publican su investigación en "Cancer Research" y señalan que esta vacuna podría utilizarse para tratar a mujeres con tumores HER2-positivos, cánceres resistentes al tratamiento y prevenir recidivas. Asimismo, opinan que podría tener utilidad como medio preventivo en mujeres sin cáncer pero con alto riesgo de desarrollarlo.

Explican que los receptores HER2 promueven el crecimiento celular normal y se encuentran en bajas cantidades en las células mamarias sanas. Sin embargo, las células mamarias HER2-positivas pueden contener muchos más receptores de lo normal, y promueven una forma de tumor particularmente agresiva que afecta al 20-30% de todas las pacientes con cáncer de mama. Fármacos como el trastuzumab o el lapatinib, diseñados para destruir esos receptores, constituyen la principal terapia, pero una significativa proporción de pacientes desarrolla resistencia a estos fármacos.

Los autores del nuevo trabajo destacan que la respuesta inmunitaria contra los receptores HER2 observada con la vacuna fue potente y funcionó incluso en tumores resistentes a las actuales terapias.

La vacuna incluye genes que producen el receptor HER2 y un estimulante inmunitario, insertados en un plásmido bacteriano inerte. Los investigadores utilizaron impulsos eléctricos para liberar la vacuna inyectada en las patas de los ratones, donde el gen produjo una gran cantidad de receptores HER2 que activaron la producción de anticuerpos y la acción de los linfocitos T asesinos. La producción masiva de receptores alerta al organismo de una invasión que requiere ser eliminada, algo que no ocurre cuando los receptores HER2 se expresan a un nivel bajo sobre la superficie de las células normales.

Durante ese proceso inducido por la vacuna, el sistema inmunológico aprende a atacar a las células tumorales que presentan grandes cantidades de receptores HER2.

Además, utilizaron un agente que, temporalmente, suprime la actividad de los linfocitos T reguladores, que normalmente frenan la acción del sistema inmunitario. En ausencia de esos linfocitos, la respuesta inmunitaria es mucho más fuerte. Posteriormente, cuando los investigadores desencadenaron tumores HER2-positivos en los ratones, el cáncer fue erradicado.

"Puede ser una respuesta para las mujeres con estos tumores que han desarrollado resistencia a los fármacos disponibles", concluyen los autores.

Cancer Research 2008 68: 7502-7511