Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Científicos de la Universidad de California, en San Francisco, publican haber identificado los tipos de genes y sistemas del organismo que permiten duplicar la expectativa de vida del gusano Caenorhabditis elegans, tras haber investigado todos los cambios genéticos que se derivan de una sola mutación. Explican en la edición electrónica de "Nature" que el ser humano comparte muchos de esos genes y que su conocimiento podría proporcionar pistas sobre cómo incrementar la longevidad.



Los autores observaron que una sola mutación genética llamada daf-2, asociada a un incremento de la expectativa de vida en C. elegans, ejerce su influencia de genes antimicrobianos y metabólicos, a través de genes que controlan la respuesta al estrés celular y reduciendo la actividad de genes que acortan el tiempo de vida.



La investigación pone de manifiesto que son muchos los genes implicados en la longevidad y que cada cual ejerce un pequeño papel en este sentido. Sin embargo, lo más interesante es que el gen daf-2 es el que une a todos esos genes en un circuito regulatorio común y es el que permite ese gran aumento de la expectativa de vida, señala la Dra. Cynthia Kenyon, una de las autoras del artículo.



Desactivando genes individualmente, tanto en gusanos normales como en otros manipulados para presentar la mutación en el daf-2, los autores pudieron comprobar que ningún gen por sí mismo determina la expectativa de vida. Algunos genes claves, por su parte, parecen aumentarla entre un 10 y un 30%. Pero el papel esencial recae en el daf-2, que cuando participa en el proceso controlando al resto de genes, produce enormes cambios en la longevidad.



El equipo de la Dra. Kenyon ya descubrió hace diez años que una mutación en el daf-2, que codifica un receptor hormonal similar a los receptores humanos para la insulina y el IGF-1 duplicaba el tiempo de vida del citado gusano. El mismo o parecido mecanismo se ha comprobado posteriormente en la mosca del vinagre y el ratón y parece intervenir en el control de la longevidad humana. También descubrieron que el daf-2 afecta al tiempo de vida a través de un segundo gen, el daf-16, cuya función es controlar la expresión de otros genes.



En opinión de la Dra. Kenyon, "tal vez algún día seamos capaces de actuar sobre los sistemas insulina/IGF-1 en las personas para producir muchos de los beneficios observados en el gusano".



Nature 2003;10.1038/nature01789