Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El uso prolongado de la terapia hormonal con estrógeno, o estrógeno más progestina, no disminuye el riesgo de demencia, según estudio publicado en la American Journal of Epidemiology.
¨Los resultados sobre la relación entre la terapia hormonal y la enfermedad de Alzheimer son contradictorios¨, escribió el equipo dirigido por la doctora Valerie Crooks. Estos se
difundieron en una investigación realizada a 2900 mujeres con 75 años como promedio, que participaron en un programa de salud del sur de California, en 1999. Los científicos controlaron -hasta el 2003- a mujeres sin demencia mediante pruebas anuales de habilidad mental.
De las participantes 1500 utilizaban terapia hormonal. La edad promedio al inicio de la terapia era de 48,3 años para las consumidoras de estrógeno y de 54,9 años para aquellas que combinaban estrógeno con progestina. La duración de la terapia fue de 30,5 años y de 23,2 años, respectivamente.
Durante la investigación desarrollaron demencia 283 mujeres. Al considerar la edad, el nivel educacional y los antecedentes clínicos la utilización de hormonas no modificó el riesgo de demencia.
Se demostró que la terapia hormonal no protegió de la demencia a mujeres que la utilizaron para aliviar trastornos de la menopausia, dijo Crooks.
Se desconoce cómo la terapia hormonal puede influir en el riesgo de demencia. El estudio reafirma la evidencia de que su utilización no previene la aparición de la demencia en mujeres ancianas, concluyó la investigadora.


Fuente: Nueva York, abril  17/2008 (Reuters Health)