Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos
Inyectadas a ratas de ancianas, ayuda a rejuvenecer las células madre neurales y mejora el microambiente en el área del hipocampo function init() { document.vars.activa.value="1"; document.getElementById('flecha_siguiente').style.cursor='pointer'; document.getElementById('flecha_anterior').style.cursor='default'; document.getElementById('flecha_anterior').style.backgroundPosition='bottom'; num_imagenes = parseInt(document.vars.num_imagenes.value,10); if (num_imagenes==1) { document.getElementById('flecha_siguiente').style.display='none'; document.getElementById('flecha_anterior').style.display='none'; } if (num_imagenes==0) { document.getElementById('imagenes').style.display='none'; } } function siguiente () { num_imagenes = parseInt(document.vars.num_imagenes.value,10); activa = parseInt(document.vars.activa.value,10); if(activa Un estudio firmado por investigadores de la Universidad de South Florida (Estados Unidos) indica que cuando células humanas de sangre de cordón umbilical se inyectan en animales de laboratorio de edad avanzada en el cerebro de estos animales se observan mejoras en el microambiente en la región del hipocampo, así como un subsiguiente rejuvenecimiento de las células madre neurales. La investigación, publicada en ¨BMC Neuroscience¨, abre la posibilidad de utilizar terapia celular dirigida al rejuvenecimiento del cerebro anciano. Los autores explican que la neurogénesis en las células cerebrales disminuye dramáticamente al alcanzarse una edad avanzada, en gran parte debido al empobrecimiento creciente del microambiente cerebral. ¨El incremento de la neurogénesis observada en este estudio tras inyectar células de sangre de cordón umbilical parece deberse a una disminución de la inflamación¨, añaden. Esa reducción de la neurogénesis se ve acompañada de una disminución de la proliferación de células madre y no por la pérdida de células, comentan en su artículo, recordando que en el cerebro hay dos grupos de células madre, uno de ellos en el hipocampo. ¨Como en cualquier otra parte donde se generan células madre, en el cerebro también pierden su capacidad para generar nuevas células, y un potente estresante de la proliferación de células madre es la inflamación¨, escriben. En experimentos previos observaron que se puede reducir la neuroinflamación en ratas ancianas bloqueando la síntesis de la interleucina 1 (IL-1), lo cual mejora la función cognitiva. En la nueva investigación comprobaron que la inyección de células de cordón umbilical tiene un potencial similar para reducir la inflamación y restaurar la capacidad perdida de las células madre para proliferar y diferenciarse como neuronas. En su experimento observaron que el número de células proliferativas aumentó en las 24 horas siguientes a la inyección y que dicha proliferación continuó durante al menos 15 días tras una única inyección. |