Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Los testículos constituyen una reserva de células madre adultas de fácil acceso que podrían transformarse en células cardíacas o nerviosas permitiendo curar pacientes, según estudios publicados en la edición de este jueves de la revista científica británica Nature.
Investigadores australianos ya descubrieron células madre en el útero de las mujeres, capaces de transformarse en distintos tipos de células y susceptibles de permitir varios tratamientos, según un estudio aparecido hace poco en la publicación mensual europea, Human Reproduction.
Ahora, un equipo de científicos estadounidenses encabezado por Shahin Rafii, del Howard Hughes Medical Institute y del Weill Medical Cornell of Collage University de Nueva York, pudo controlar en un laboratorio el desarrollo de células madre a partir de células de testículos de ratones, normalmente destinadas a convertirse en espermatozoides.
Las células precursoras de esperma (espermatogonias) fueron reprogramadas con el fin de obtener células madre “multipotentes”, capaces de formar otros tejidos.
Estas “células madre adultas multipotentes derivadas de espermatogonias”, pudieron así convertirse en células endoteliales (células que tapizan las paredes de las venas), en células cardíacas contráctiles o en neuronas.
“Las investigaciones previas habían recurrido a una manipulación genética para reprogramar las células adultas”, pero este método de reprogramación implica un mayor riesgo de cancerización de las células madre obtenidas, destacó el Weill Cornell Medical Collage en un comunicado.
La novedad de este trabajo, según Rafii, es que “no hay que añadir o modificar genes para que las espermatogonias del ratón se transformen en células multipotentes y que éstas produzcan a continuación todos estos tipos de células”. “Pero resta reproducir estos hallazgos en seres humanos”, advirtió.
Nuevas investigaciones también deberían permitir hallar con más precisión “cómo controlar a demanda” la transformación de las espermatogonias.
Los trabajos publicados este jueves buscan ampliar las posibilidades con las células madre adultas con la esperanza de evitar así el recurso de las células embrionarias, que levantan debates éticos.
Las células madre embrionarias son capaces de especializarse para convertirse en cualquier tipo de célula del organismo, mientras que las células madre “adultas”, más especializadas, ofrecen un abanico más reducido de posibilidades.