Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Investigadores de la Universidad de Utah (Estados Unidos) advierten que medicaciones antimigrañosas frecuentemente recetadas pueden ser infectivas, e incluso tóxicas, si se administran conjuntamente con productos basados en plantas medicinales, como la hierba de San Juan, la raíz de valeriana o el extracto de ginkgo biloba.



Estos datos se han presentado en Chicago, en el marco de la reunión anual de la Sociedad Americana de Cefalea, donde se destacó que los antimigrañosos de la familia de los triptanes y los antidepresivos tricíclicos (utilizados para prevenir la cefalea en algunas personas) pueden interactuar con los citados suplementos de hierbas.



Los investigadores norteamericanos añadieron que otros productos basados en plantas medicinales pueden desencadenar o empeorar los ataques de migraña y de cefalea en racimos en personas predispuestas.