Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El español José María Ordovás, director del Laboratorio de Genómica y Nutrición de la Universidad estadounidense de Tufts, identificó un gen que protege de la obesidad con independencia de la grasa que contenga la dieta de las personas que lo portan.
Ordovás, presentado por la Sociedad Española de Arterioesclerosis a los Premios Príncipe de Asturias por sus trabajos, demuestra así que, en determinados casos, una dieta con alto contenido graso no provoca obesidad, especialmente cuando son grasas monoinsaturadas, como sucede en la dieta mediterránea, indicó la Universidad de Tufts en un comunicado.
El estudio, que se publica en el último número de la revista Journal of Molecular Medicine, forma parte de otro más amplio, denominado Framingham sobre nutrigenómica.
Su trabajo demuestra que una de las variantes del gen de la apolipoproteína A5 (ApoA5), cuya misión es metabolizar la grasa del organismo, protege de la obesidad a quienes lo tienen.
El equipo de Ordovás ha detectado que en las personas con el gen polimorfismo nucleótido único "-1131T mayor que C" de la ApoA5- no existía relación entre la ingesta de grasa y su índice de masa corporal (IMC).
En el resto de los participantes en el estudio, la mayor ingesta de alimentos grasos se traducía en un aumento de la masa corporal.
Quienes consumían 11% de calorías procedentes de grasas monoinsaturadas presentaron un menor riesgo de obesidad.
La otra cara de la moneda, según el trabajo, es que quienes tienen ese gen no pierden peso cuando quieren hacerlo modificando su alimentación.