Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El tratamiento no quirúrgico para eliminar la obstrucción de las arterias en los pies y las piernas puede evitar que deban amputarse las extremidades, aún cuando esos vasos sanguíneos son pequeños y complicados para trabajar sobre ellos, informaron investigadores.
El equipo del doctor Nael Saad, del Centro Médico de la Universidad de Rochester en Nueva York, notificó una tasa de éxito del 91% en la prevención de amputaciones a 18 meses de la intervención.
El procedimiento, que se denomina angioplastia, consiste en eliminar la obstrucción de la arteria por medio de un tubo que se inserta a través de una pequeña incisión y una malla metálica denominada stent para mantener despejado el flujo sanguíneo. "Este estudio demuestra que con la angioplastia y la colocación del stent podemos restablecer el flujo de sangre en los vasos más pequeños de las piernas y mantenerlos abiertos a largo plazo, evitando a estos pacientes una riesgosa amputación", manifestó Saad en un comunicado.
Los 47 pacientes analizados padecían enfermedad arterial periférica, causada por la aterosclerosis o endurecimiento de las arterias. La condición afecta entre un 12 y un 20% de los estadounidenses de 65 años o más, lo que representa unos 10 millones de personas.
La enfermedad puede ser producto del tabaquismo, la diabetes mellitus, el colesterol alto y la obesidad, y generalmente el único tratamiento posible es una derivación quirúrgica (bypass) en la cual se realiza un injerto venoso para permitir que la sangre circule nuevamente de forma normal en la zona afectada.
Saad declaró que su tratamiento, que utiliza un catéter insertado a través de la arteria femoral en la ingle, requiere una incisión pequeña del tamaño de la punta de un lápiz.