Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un componente de la orina, la urea, podría ayudar a florecer el fitoplacton en zonas donde escasea, lo que contribuiría a combatir el cambio climático, sugirió el martes un científico australiano en esta capital.
El profesor Ian Jones, de la Universidad de Sidney planteó que ese componente es rico en nitrógeno y contribuiría al crecimiento de esos microorganismos, primera fuente de nutrientes de la vida marina.
Al igual que las plantas terrestres, el fitoplacton realiza la fotosíntesis, emplea la luz solar para transformar el dióxido de carbono en oxígeno.
La iniciativa de Jones se inspiró en las consecuencias de las inundaciones, que llevan nutrientes a los mares, lo que influye en la variabilidad de la cantidad de fitoplacton.
De esa forma, el experto comprobó que al aumentar los nutrientes en los mares, también incrementa la cantidad de esos organismos microscópicos.
Además, Jones analizó un estudio anterior realizado por científicos estadounidenses sobre cómo la falta de hierro, afectaba a la población de fitoplacton.
El equipo norteamericano vertió hierro en lugares donde escaseaba el fitoplacton, y este aumentó. Pero el investigador australiano piensa que la urea es un mejor nutriente y también más económico.
Con respecto a su estudio, declaró a la prensa británica: “Si no nos gustan los resultados, siempre podemos cerrar el chorro (de urea). Es como la irrigación. Cuando dejas de suministrar alimento para el plancton, éste simplemente morirá”.

Fuente: Londres, febrero 20/2007 (PL)