| La formula láctea enriquecida no es mejor que la fórmula estándar para alimentar a los bebés prematuros después del alta hospitalaria, indicó un estudio publicado en la American Journal of Clinical Nutrition. "Nuestro estudio desafía el dogma actual sobre el uso de fórmulas especiales de leche para alimentar a los bebés prematuros después del alta hospitalaria", dijo a Reuters Health el doctor Winston W. K. Koo, de la Universidad Wayne State y del Hospital Hutzel, en Detroit. Koo y la investigadora Elaine M. Hockman compararon el crecimiento, la masa ósea y la composición corporal de 89 bebés prematuros, que recibieron al azar una leche enriquecida con nutrientes o una fórmula estándar durante el primer año posterior al alta hospitalaria. Los investigadores hallaron que los bebés alimentados con la fórmula estándar obtuvieron calificaciones mucho más altas en todas las variables de crecimiento que los bebés que tomaron la fórmula enriquecida. Las tasas de aumento de peso y estatura eran mucho más altas entre los bebés alimentados con la leche estándar. Los resultados de estudios por imágenes con rayos X mostraron también que el grupo que recibió la formula estándar tenía un mayor contenido mineral óseo, grasa y tejido magro que el grupo que recibió la fórmula enriquecida. "Los ensayos clínicos previos eran inconsistentes a pesar de los beneficios teóricos de la fórmula enriquecida y nuestro estudio no pudo demostrar ningún beneficio en el peso corporal, la estatura u otros indicadores del crecimiento de los tejidos, como la cantidad de hueso, grasa y tejido magro", comentó Koo. "Por lo tanto, nuestro estudio es similar a hallar que un fármaco no funciona tan bien como se pensaba cuando se analiza con más cuidado", agregó el investigador. Los resultados señalan "muchas cuestiones importantes" que exigen más estudio, dijo Koo y agregó: "Esperamos que nuestros estudios sobre el respaldo de la nutrición en los bebés prematuros proporcionen recomendaciones científicas en un futuro no tan lejano". Mientras tanto, concluyó el experto: "Un seguimiento cuidadoso del bebé, una revisión crítica de los estudios científicos y el escepticismo a la publicidad serían un gran avance para proporcionarle buenos cuidados a los pacientes". |
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