Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Los medicamentos actuales para controlar la hipertensión arterial y los niveles de colesterol disminuyen las probabilidades de sufrir un ataque cardíaco tres meses después de iniciado el tratamiento, según un estudio divulgado el jueves.
La revista European Heart Journal se hizo eco de una investigación que involucró a 19 000 personas tratadas con el fármaco Lipitor y Norvasc, un producto contra la hipertensión arterial, que redujo el riesgo de problemas cardíacos, mortales o no, en el 53%.
El estudio muestra que la combinación de ambos medicamentos resulta tres veces más efectiva para reducir las probabilidades de un ataque cardíaco que el Lipitor con un betabloqueador, un viejo tipo de fármaco antihipertensivo.
Estas conclusiones forman parte de ASCOT, un análisis sobre la eficacia de los fármacos modernos en la reducción de eventos cardíacos.
Los resultados de la investigación se dan a conocer después que la compañía farmacéutica Pfizer, productora de Lipitor, comunicara que dejó de producir un producto contra el colesterol llamado Torcetrapib, por la muerte de 82 personas en ensayos clínicos. Ese medicamento debía sustituir al Lipitor como droga contra el llamado colesterol malo y la farmacéutica necesita otro de alto precio para reemplazarlo, cuando su patente exclusiva expire en pocos años.