Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un gran estudio publicado en "The Lancet" señala que los médicos deberían considerar rutinariamente prescribir estatinas a todos aquellos pacientes diabéticos que presentan un riesgo sustancial de experimentar un infarto de miocardio o un ictus.



La investigación es un estudio británico multicéntrico en el que han participado casi 6.000 pacientes con diabetes y que, según sus autores, proporciona la primera evidencia definitiva de que las estatinas reducen el riesgo de infartos de miocardio, ictus e intervenciones de revascularización aproximadamente un tercio de los pacientes, independientemente de los niveles de colesterol que presenten o de la presencia de arteriopatía.



Asimismo, los autores consideran que sus resultados ponen de relieve la necesidad de modificar las directrices sobre el tratamiento de la diabetes para que hagan más énfasis en la reducción de los niveles lipídicos en todos los afectados.



De hecho, se estima que, en función de tales resultados, más de 100 millones de diabéticos de todo el mundo serían candidatos a recibir tratamiento con estatinas y que con ello se prevendrían en el planeta alrededor de un millón de infartos, ictus e intervenciones de revascularización cada año.



Participaron en la investigación 69 hospitales británicos, coordinados por el Servicio de Ensayos Clínicos de la Universidad de Oxford. El 90% de los casi 6.000 pacientes participantes presentaba diabetes tipo 2. Alrededor de 2.000 ya tenían enfermedad coronaria, 1.00 presentaban arteriopatía oclusiva y los otros 3.000 no mostraban evidencia de ninguna de estas enfermedades.



El fármaco utilizado en el estudio fue la simvastatina, que a la dosis de 40 mg diarios demostró ser efectivo en todos los pacientes a la hora de reducir los niveles de colesterol.



Los resultados globales muestran que un 25% de los participantes que recibieron placebo experimentaron algún acontecimiento cardiovascular mayor durante los 5 años de estudio. Sin embargo, la simvastatina redujo el riesgo cardiovascular en una cuarta parte.



Entre los pacientes con arteriopatía oclusiva la tasa de acontecimientos cardiovasculares en el grupo placebo fue del 15%. Simvastatina redujo dicha tasa en una cuarta parte respecto al grupo placebo.



Los autores también destacan que incluso en pacientes con niveles de colesterol LDL considerados relativamente bajos, la estatina disminuyó la tasa de eventos cardiovasculares en una cuarta parte.