Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la reducción drástica de la contaminación del aire en las ciudades evitaría 120.000 muertes anuales provocadas por infecciones respiratorias, cardiopatías y cáncer de pulmón.

La organización estima que cada año mueren 800.000 personas en el mundo a causa de la polución ambiental, y que el uso de combustibles "limpios" reduciría esa cifra en un 15%.

La OMS ha hecho públicas las primeras Directrices sobre Calidad del Aire, en cuya elaboración se ha consultado a más de 80 científicos a lo largo de tres años.

La española María Neira, directora de la OMS en materia de salud pública y ambiental, reconoce que será un enorme reto para algunas ciudades aplicar las medidas de estas directrices, ya que no es fácil. "Pero si podemos reducir los niveles de contaminantes a los estándares recomendados –añade- la mortalidad causada por la contaminación ambiental externa se reducirá en un 15%".

En cuanto a la contaminación interna, dentro de los hogares, causada por combustibles sólidos que se queman para cocinar y calentar, mata anualmente a otros 1,2 millones de personas, lo que eleva la cifra total de muertes causadas por la contaminación del aire hasta los 2 millones.

Según los datos de la OMS, las ciudades del mundo más contaminadas son Karachi, Nueva Delhi, Katmandú, Beijing, Lima y El Cairo. En Europa, las ciudades más afectadas son las de Bélgica y los Países Bajos, además de Milán, en Italia. En Estados Unidos son las de la Costa Este y Los Angeles.

Las recomendaciones de la OMS se basan principalmente en reducir la emisión de gases al quemar combustibles fósiles a alrededor de 20 microgramos por metro cúbico.