Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El consumo de café, sobre todo cuando es descafeinado, podría estar asociado con un menor riesgo de diabetes tipo 2, según un estudio de la Universidad de Minnesota en Minneapolis (Estados Unidos) que se publica en la revista Archives of Internal Medicine.

Los expertos explican que estudios anteriores en los Estados Unidos y Europa han vinculado el café con un menor riesgo de diabetes tipo 2. La conexión entre café y riesgo de diabetes parece consistente en diferentes edades y pesos corporales, además, la mayor parte de las investigaciones ha descubierto que a mayor cantidad de café consumida menor el riesgo de diabetes.

Los científicos estudiaron el consumo de café y el riesgo de diabetes en 28.812 mujeres postmenopáusicas en Iowa durante un periodo de 11 años. Al inicio del estudio, en 1986, las mujeres respondieron cuestiones sobre sus factores de riesgo en lo relativo a la diabetes, incluyendo el índice de masa corporal, la actividad física, el consumo de alcohol y los antecedentes de tabaquismo. También informaron sobre la frecuencia en la que consumieron una variedad de alimentos y bebidas en el año anterior, incluyendo el café normal y descafeinado.

Según los datos recogidos en el cuestionario inicial, alrededor de la mitad de las mujeres (14.224) bebieron entre una y tres tazas de café al día; 2.875 tomaron más de seis tazas; 5.554 entre cuatro y cinco tazas; 3.231 menos de una taza; y 2.928 ninguna. Durante más de 11 años de seguimiento, 1.418 mujeres informaron en las entrevistas que habían sido diagnosticadas con diabetes tipo 2.

Según los científicos, las mujeres que tomaban más de seis tazas de cualquier tipo de café al día fueron un 22 por ciento menos propensas que aquellas que no tomaron café a ser diagnosticadas con diabetes tipo 2; aquellas que tomaban más de seis tazas de café descafeinado al día tenían un 33 por ciento menos de riesgo en comparación con las que no tomaban ninguna.

El consumo total de cafeína no parecía estar relacionado con el riesgo de diabetes, lo que sugería que algún otro ingrediente del café era el responsable del efecto. Según los científicos, el magnesio en el que es rico el café podría explicar alguna asociación inversa entre el consumo de café y el riesgo de diabetes tipo 2. Otros componentes del café considerados beneficiosos son los polifenoles, que ayudan al organismo a procesar los carbohidratos, y los antioxidantes que podrían proteger a las células del páncreas, en el que se produce la insulina.