Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El uso de teléfonos móviles no aumenta el riesgo de tumores cerebrales, al menos a corto plazo, según un estudio publicado el viernes en la revista British Medical Journal.

Según el informe, no existe relación entre el empleo de móviles y los tumores cerebrales, aunque se desconocen sus efectos a largo plazo porque los móviles se utilizan de forma generalizada desde hace poco tiempo. Para una de los investigadores, Patricia McKinney, "nuestro estudio sólo ha podido evaluar los efectos a corto plazo, porque la mayor parte de la gente lleva utilizado los móviles desde hace menos de diez años".

Este estudio, el mayor efectuado hasta ahora sobre la posible relación entre los tumores cerebrales y los móviles, ha sido llevado a cabo por investigadores de las universidades de Leeds, Nottingham y la de Manchester (norte de Inglaterra), junto con el Instituto de Investigación del Cáncer de Londres.

Para desarrollar la investigación, los científicos compararon el uso que hacían de los móviles 966 enfermos con glioma, el tumor cerebral más frecuente, con 1 716 voluntarios sanos.

Llegaron a la conclusión de que aquellas personas que utilizaban de forma habitual el teléfono móvil no tenían un mayor riesgo de desarrollar un glioma. Tampoco encontraron relación entre el cáncer y el tiempo que una persona llevaba usando el móviles, con el número de llamadas efectuadas, ni con su duración.

Estos resultados confirman las conclusiones de otros realizados en Estados Unidos, Dinamarca y Suecia. Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió recientemente que se investigue más este tema, en particular si existen riesgos para los niños. Los científicos temen que exista un riesgo específico en las zonas rurales, ya que la señal electromagnética es más potente.

Las conclusiones que publica la BMJ forman parte de un estudio internacional de trece países sobre los efectos del teléfono móvil en la salud.

Los casos de tumor cerebral han aumentado en el Reino Unido durante los últimos 30 años, con una media entre 4 000 y 4 500 diagnósticos al año. McKinney explicó que el número de casos aumenta entre un 2 y un 3% cada año, aunque apuntó que una de las causas de este aumento podría ser que cada vez hay mejores métodos para detectar y diagnosticar los tumores.