El caso de un paciente de 39 años infectado diagnosticado de sida que ha sobrevivido dos años tras recibir un trasplante cardíaco plantea la posibilidad de que pacientes infectados por el VIH sean candidatos a este tipo de intervención, algo no considerado factible por su previsiblemente mal pronóstico. El caso se publica en "The New England Journal of Medicine", donde se señala que ya se realizan trasplantes renales y hepáticos a pacientes seropositivos. El pacientes, antiguo investigador de Harvard, se infectó en 1986 y fue diagnosticado de sida en 1992. El trasplante de corazón se practicó en febrero del 2001. Hasta la fecha no ha experimentado reactivación de infecciones oportunistas y su carga viral continúa siendo baja, y se ha recuperado del trasplante sin complicaciones. |