En los próximos dÃas, coincidiendo con la celebración del Congreso Europeo de Hipertensión en Milán (Italia), las Sociedades Europeas de Hipertensión y CardiologÃa publicarán la primera "GuÃa Europea de Manejo de la Hipertensión Arterial", que basándose en guÃas anteriores de la OMS defiende principalmente el tratamiento individualizado del paciente hipertenso, atendiendo a sus caracterÃsticas y factores de riesgo (diabetes, hipercolesterolemia, tabaquismo, obesidad, etc.) personales. Por el contrario, hace unas semanas, sus colegas norteamericanos presentaron en el Congreso de la Sociedad Americana de Hipertensión el nuevo informe del Joint National Commitee on Prevention, Detection, Evaluation and Treatment of High Blood Pressure (JNC nº 7), donde se modificaron varias directrices importantes acerca del manejo de la HTA respecto al informe anterior. Estos se pueden resumir principalmente en el establecimiento del concepto de "prehipertensión", definido como la presencia de cifas tensionales iguales o superiores a 120/80 mm Hg, la falta de clasificación por factores de riesgo y la introducción de la indicación de los antihipertensivos diuréticos como medicación de primera elección para la mayorÃa de hipertensos. Según el Dr. José Luis Rodicio, presidente de la Sociedad Europea de Hipertensión, el nuevo informe norteamericano "nace con la intención de simplificar las directrices de manejo de la HTA existentes hasta el momento. Pero, desde el punto de vista europeo, algunas de las modificaciones respecto al informe anterior no son compartidas. Este es el caso del nuevo término de la clasificación denominado prehipertensión 013120/80 mm Hg-, cifra que según los norteamericanos marca el inicio de la intervención del médico en los hábitos de vida del paciente y, si es necesario, para iniciar la terapia farmacológica. La Sociedad Europea de Hipertensión, por el contrario, considera esas cifras como normales o normales-altas, sin que en ningún momento sean predictivas de un futuro caso de paciente hipertenso". "Por otro lado 013continúa el Dr. Rodicio-, en el nuevo JNC nº 7 desaparecen la estratificación de los factores de riesgo del individuo hipertenso, al revés de lo que se reflejaba en el JNC nº 6. Es decir, no se tienen en cuenta los factores de riesgo de los enfermos a la hora de ejercer un control de los hábitos de vida del paciente o de imponer terapia farmacológica". Las recomendaciones de tratamiento farmacológico es otro elemento diferenciador entre las directrices norteamericanas y europeas. Explica el Dr. Josep Redón, presidente de la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA) que, "influenciados por el estudio ALLHAT, publicado hace unos meses en Estados Unidos, el JNC nº 7 indica que el tratamiento de la HTA debe iniciarse con un medicamento diurético, al margen de los factores de riesgo y caracterÃsticas del paciente. Pero en las guÃas europeas el tratamiento se inicia dependiendo de las cifras de presión arterial y de los factores de riesgo asociados, ya que no todos los hipertensos reaccionan igual frente a los diferentes medicamentos". En opinión de este especialista, si bien el estudio ALLHAT obtuvo excelentes resultados con el uso de diuréticos, "los norteamericanos no han tenido en cuenta los efectos a largo plazo, ya que los diuréticos en monoterapia pueden provocar alteraciones del sistema metabólico y aumentar los niveles de glucosa, con el consiguiente riesgo de desarrollo de diabetes. Por ello, aunque se piense que son mucho más económicos en un primer paso, necesitan un seguimiento mucho más exhaustivo, lo que implica un mayor gasto a posteriori". |