Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Los ministros de Sanidad de la Unión Europea y la Comisión Europea han decidido, en una reunión celebrada en Noruega, realizar en el plazo de cinco años un sistema integrado "E-Health", interoperable y compatible entre los distintos países, con el fin de poner las nuevas tecnologías de información al servicio de la salud de los ciudadanos.



A través de un plan de acción europeo, estrategias nacionales, así como los portales de Internet se contribuiría a acelerar la apertura de la asistencia sanitaria a través de Internet. Está prevista la celebración de una conferencia de seguimiento a nivel ministerial para mediados de mayo de 2006 en Málaga (España).



El ministro de Salud luxemburgués, Marzo Di Bartolomeo, destacó en su discurso de apertura la importancia del método abierto de coordinación entre Estados miembros con el fin de hacer avanzar en la política europea de salud, una tarea que en principio es de competencia exclusiva de los gobiernos. Y ello porque los grandes retos de la salud pública, como el VIH/sida, las epidemias, el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, la obesidad y el abuso de drogas, no conocen fronteras.



"Los nuevos medios tecnológicos que ofrece la sociedad de la información tienen un potencial casi ilimitado y deben ser utilizados a favor de la salud pública. Todos los socios europeos deben definir, cada uno para sí, un sistema nacional de intercambio informático de datos e información de salud", señaló Di Bartolomeo en un comunicado.



En opinión de la presidencia, es imprescindible que los socios europeos intensifiquen su trabajo de coordinación, que designen corresponsales nacionales, que definan las mejores prácticas, y se den respuestas comunes a los problemas comunes, como la protección de los datos y el respeto de la esfera privada. De este modo, defendió que la UE defina objetivos comunes con el fin de mejorar la cobertura y la eficacia de los servicios sanitarios, tanto dentro de los sistemas nacionales como de forma transfronteriza; garantizar la durabilidad de la financiación de los sistemas de salud, y evitar los efectos secundarios.



Por otra parte, el ministro de Luxemburgo subrayó que "el e-health no es realizable a tarifa cero", pero nadie puede negar su plusvalía a la vez para los pacientes, como para la eficacia de los sistemas de salud y los sistemas de financiación.



Otros objetivos comunes abordados por los ministros fueron que los expedientes médicos sean accesibles mediante sistemas asegurados de autentificación por una tarjeta sanitaria electrónica, la utilización de Internet como herramienta a la promoción de la vida sana y la información a médicos y profesionales de la salud sobre los últimos avances en medicina.



En esta tercera Conferencia europea sobre la salud en línea, organizada junto con el Gobierno noruego, la Presidencia luxemburguesa de la Unión Europea y la Comisión Europea, participaron alrededor de 500 expertos del ámbito de la salud y la informática.