Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La insuficiencia renal crónica se ha convertido en un problema de salud pública en todo el mundo, ya que cada año se registra un aumento entre el 4 y el 5% de casos y supone un gran riesgo de morbilidad, según datos difundidos por la Sociedad Española de Nefrología (SEN).



Según los expertos, la insuficiencia renal crónica guarda una relación estrecha e intensa con enfermedades cardiovasculares, habiéndose convertido en el principal factor de riesgo, por encima incluso de la diabetes o la hipertensión arterial.



En este sentido, la SEN advirtió de que esta enfermedad cuenta con un mal pronóstico, ya que la mayoría de los pacientes fallecen o precisan diálisis o trasplante.



En la actualidad, en España hay unas 22.000 personas sometidas a diálisis y cada año unas 5.500 personas entran en este tratamiento. La supervivencia de este grupo de población a los 5 años se sitúa en el 34%, y la tasa de hospitalizaciones es de 14 días al año por paciente, con unos costes directos del tratamiento superior a los 800 millones de euros anuales.



Según el Dr. Francisco Fernández Vega, médico adjunto del Servicio de Nefrología, Unidad de Hipertensión del Hospital Universitario Central de Asturias, la correlación entre la insuficiencia renal y la enfermedad vascular es manifiestamente superior en poblaciones de alto riesgo, como los pacientes hipertensos esenciales, diabéticos y ancianos.



Asimismo, se ha demostrado que el riesgo de muerte de cualquier causa en pacientes con insuficiencia renal es muy superior a la probabilidad de iniciar tratamiento renal sustitutivo, incluso en estadios avanzados de la enfermedad.