Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El sildenafilo, mejora el riego sanguíneo uterino y normaliza el peso del feto en el embarazo con hipertensión además de prevenir la mortalidad fetal, según un estudio realizado en animales de laboratorio por investigadores del Colegio de Medicina de la Universidad de Vermont. Los resultados de la investigación se han hecho públicos en el 35 Congreso de la Unión Internacional de Ciencias Fisiológicas que se celebra estos días en San Diego (Estados Unidos).



Según los expertos, este es el primer estudio en considerar el efecto del sildenafilo durante el embarazo en el que existe hipertensión arterial que muestra hechos significativos como el crecimiento fetal y su bienestar así como la circulación uterina de la madre. Los resultados positivos del estudio podrían indicar posibles utilidades en la preeclampsia, la causa principal de mortalidad y enfermedad durante el embarazo en todo el mundo.



Los científicos indican que aunque el sildenafilo en realidad no disminuyó la presión arterial de la embarazada sí produjo algunos efectos beneficiosos y significativos sobre los resultados de la adaptación vascular debida al embarazo así como en los resultados fetales.



Según los científicos, cuando se administró sildenafilo a animales preñados en los que se había provocado hipertensión arterial se produjeron tres consecuencias saludables. En primer lugar el fármaco ayudó a las arterias del útero a crecer como lo harían durante un embarazo normal. Los investigadores explican que la hipertensión disminuye el crecimiento y altera la contractibilidad de los vasos sanguíneos en el útero. En los animales con hipertensión tratados con sildenafilo el diámetro de las arterias era mayor que en los animales control lo que sugería que habían crecido así para aumentar el flujo sanguíneo al útero y la placenta.



En segundo lugar, los investigadores explican que sildenafilo aumentó el peso fetal hasta llegar a valores normales en comparación con otros animales no tratados cuyo peso mostraba una reducción de un 20 por ciento.



Por último, el fármaco previno la reabsorción fetal o mortalidad fetal, ya que mientras que el 11 por ciento de los fetos se perdieron en el grupo de animales con hipertensión, ninguno se perdió en el grupo que recibió el fármaco, aunque aún se mantenían hipertensos.



Según los investigadores, se necesitan estudios posteriores para comprender mejor cómo y por qué el sildenafilo ayuda a la adaptación vascular uterina en las embarazadas y al crecimiento fetal, si los beneficios serían similares en humanos y si podría haber efectos secundarios.