Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El optimismo ha invadido a las autoridades chinas, que han declarado tener bajo control la epidemia de neumonía atípica en todo el país, «incluídas las zonas rurales». El Ministerio de Salud chino reconoció que ayer habían muerto cuatro personas en Pekín a consecuencia del coronarivus y habían detectado una nueva infección, informa en su edición del domingo, 1 de junio, el diario ABC.



Este es el balance más bajo de nuevos contagios desde que el 20 de abril pasado las autoridades de este país empezaron a informar a diario de nuevos contagios del síndrome respiratorio agudo severo (SARS).



Hasta el momento y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en China se han confirmado 5.328 casos, 322 fallecimientos y 1.033 posibles infecciones de neumonía atípica. Entre estas últimas figuran diez detectadas el sábado: seis en Pekín y cuatro en la provincia de Guandong, donde surgió el brote epidémico en noviembre de 2002. Es el sexto día consecutivo en el que los nuevos casos son inferiores a la decena, cifra considerada como necesaria por la OMS para cumplir uno de los requisitos con el fin de levantar el consejo de no viajar a China.



Henk Bekedam, representante de la OMS en China, reconoció el esfuerzo que lleva a cabo el Gobierno chino para combatir la epidemia, al tiempo que elogió la cooperación que reciben los expertos europeos para investigar los focos. «Aún queda cierto peligro en rebrotes aislados como los ocurridos en Canadá por falta de un diagnóstico rápido y medidas de aislamiento», señaló Bekedam, según Efe.