Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un contaminante que se forma al freír, asar u hornear alimentos a altas temperaturas, presente en las patatas fritas y los productos que contienen cereales, como el pan y las galletas, podría suponer un riesgo para la salud pública, según advirtieron la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).



Las observaciones científicas han demostrado que la acrilamida, como se conoce a este elemento, causa cáncer en animales y que se forma cuando ciertos alimentos, particularmente los de origen vegetal ricos en carbohidratos y bajos en proteínas, se cocinan a temperaturas superiores a los 120 grados centígrados.



Ante el hallazgo, la OMS y la FAO instan a la creación de tecnologías que disminuyan el nivel de acrilamida.