Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

No hay evidencia que permita afirmar que vacunar a los niños menores de dos años contra la gripe reduce las posibilidades de muerte o complicaciones de la enfermedad, dijeron el viernes los investigadores. Los científicos analizaron 25 estudios que evaluaban el impacto de las vacunas en la reducción de casos de gripe y sus síntomas en niños y jóvenes de hasta dieciséis años. Los niños menores de dos años son vacunados contra la gripe en Estados Unidos y Canadá.

"La vacunación de niños pequeños no tiene respaldo en nuestros hallazgos", dijo el médico Tom Jefferson, del Campo de Vacunas de Cochrane en Roma, parte de Colaboración Cochrane internacional, una organización que evalúa la investigación médica.

"No encontramos evidencia convincente de que las vacunas pueden reducir la mortalidad, admisiones, complicaciones severas y el contagio de gripe en la comunidad", añadió en un informe publicado en la revista médica The Lancet.

Las campañas de vacunación contra la gripe suelen estar dirigidas a personas mayores de sesenta y cinco años. Los funcionarios de salud de Estados Unidos y Canadá han recomendado que los niños entre seis y veintitrés meses deben ser vacunados.

El año pasado, la Academia de Pediatría de Estados Unidos actualizó sus lineamientos al decir que los bebés menores de dos años debían recibir la vacuna contra el virus. Fue producto de una recomendación del Centro para la Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos. La gripe mata un promedio de 36 000 estadounidenses anualmente y es responsable de la hospitalización de otras 114 000 personas.

01CEn los niños menores de dos años, no pudimos encontrar evidencia que indique que la vacuna era diferente al placebo", dijo Jefferson a Reuters. El especialista agregó que los hallazgos no implicaban que las vacunas no funcionaran en los niños pequeños, pero no encontraron evidencia de que sí lo hiciera. Tampoco hay indicios de que las vacunas causan algún daño o alguna razón para creer que son inseguras. Los hallazgos son parte de una Revisión Metodológica Cochrane más amplia que tiene previsto publicarse en algún momento de este año.